Elephant Tree – «S/T» (2016)
Stoner Rock
Desde luego para ser mi primera toma de contacto no me he podido llevar mayor bofetada, una de esas que pocas veces puede saber tan dulce y es que el homónimo álbum de los ingleses Elephant Tree, será posiblemente recordado por uno de los pináculos dentro del TOP de los discos stoner de 2016.
Al igual que hicieran con su debut “Theia”, Magnetic Eye Records es el sello a cargo para la edición de este coloso del desierto que harán que se levanten esas dunas de arena formando gigantes paredes arenosas dónde moverte a través de su huracán sónico equipado con graves riffs, muy acordes y apropiados para la ocasión, los seguidores de esta casa y por supuesto el género stoner rock.
Más saturados incluso que en su álbum debut los londinenses muestran el verdadero monstruo que llevan en su interior para este segundo trabajo. Un homenaje al mejor fuzz, el logrado intento de ponerse a la altura de sublimes obras del género como “Welcome To Sky Valley” o “Blues For The Red Sun” y morir con las botas puestas. Ocho excusas de mucho peso para coronar a una pequeña estrella que viene dispuesta a convertirse en supernova en este 2016.
“Wither” o “Dawn” son dos perfectos ganchos iniciales que te dejarán atónito. Construidos por una fuerte coraza del mejor fuzz, prácticamente omnipresente, la distorsión es de tal magnitud que es capaz de retorcerte el alma. Jack Townley, se hace enorme en este primer tramo del álbum dejando tras de sí un buen puñado de grasientos riffs y solazos apropiados para entrar en ese trance espiritual que dejan Elephant Tree.
Los músicos son conscientes de crear una atmosfera apropiada, la aclimatación en un disco siempre es bien recibida y ayuda a acomodarse a uno para recibir las tempestades en gama baja que están a punto de llegar. Desde su intro “Spore” hasta la bella acústica “Circles” que precede a “Aphotic Blues”, uno de los pináculos del disco y mayor castigo para sus amplificadores. Ojo a ese tramo final porque pocas veces puedes haber escuchado algo más inhumano en lo que va 2016. El riff que saca el bueno de Townley haría que un carnicero como Matt Pike le diera un gran aplauso. Puro Kyuss.
La evolución en este disco con respecto a su predecesor está ahí, incluso ese mayor índice de psicodelia en sus canciones, muestran una banda mucho más completa. Hay tramos en “Echoes” que me recuerdan mucho a Elder, y esa mezcla de llevar pesados géneros como el stoner/doom y convertirlos en uno solo. Evidentemente aquí cuenta mucho la contribución de Peter Holland al bajo, pero para esto hay que llevar una producción del álbum más que distinguida para que todo éste en su sitio. Esta sexta pieza te hacer surcar en los mares de psicodelia que ofrecen los británicos, un burbujeo continúo que se balancea en alti-bajos de decibelios y que ante todo, deja una de las piezas destacadas del redondo.
Son muchas las veces, viendo esos aplastantes riffs y las voces limpias de Twonley, en que me recuerdan mucho a los Mars Red Sky de su último disco. Llevar esa psicodelia pesada hasta las llanuras del sonido arenoso, hacen de ello una mezcla perfecta. “Fracture” y “Surma” traen esos momentos atmosféricos que apenas podemos ver entre tanto músculo instrumental pero lo percibimos. También es cierto que estos últimos 13 minutos que festejan las dos últimas piezas, significan la mejor aportación a las voces de Jack quién lo mezcla perfectamente con una friega de atrocidades instrumentales de puro músculo, momentos como la parte final de “Fracture” dónde asistimos a otra sesión de machaqueo continuo a través de sus bestiales riffs. Más rápidos o más lentos pero igual de demoledores. La última pieza podría ser otra de las destacadas del LP. “Surma” se vanagloria de sí misma, nuevamente Peter Holland nos da otra lección de protagonismo al bajo con la más extensa de todo el disco y un final totalmente épico.
Lo que hace grande a este disco es su uniformidad, no hay temas prescindibles, como un “Dopesmoker” que se fusiona en una sola canción y se presenta como un verdadero blindado pesado, cargado de la mejor artillería. Este indestructible es el pequeño David que caminará entre Goliath en este 2016, una respuesta de los británicos que va directa al mentón trayendo lo mejor del sonido arenoso de los 90 dos décadas después. Que el stoner está viviendo una segunda juventud tiene su respuesta con el nuevo álbum de Elephant Tree, una mala bestia que no podrás quitarte de la cabeza.