Venus Sleeps – «Dead Sun Worship» (2015)
Stoner / Doom Metal
La apuesta que traemos hoy es bien fuerte pero si dijéramos que a finales de año los recordaremos como una de las máximas revelaciones, si declaráramos que estamos ante una banda que tiene un futuro grandioso por delante dentro de la escena doom europea por delante o si rematáramos diciendo que a seguidores de bandas como Electric Wizard, Monolord o Windhand van a encontrar su nueva banda favorita ya que estos irlandeses consiguen fusionarlo a las mil maravillas… me tomarías por un mentiroso. Si mencionamos todo esto, no es porque nos guste exagerar, vamos directo al grano pero tu como lector, antes de leer estas palabras, baja a la parte de abajo y dale al play a la primera canción. A partir de ahora empezaremos a entendernos mejor y es que Venus Sleeps y este espectacular debut larga duración que se han marcado bajo el nombre de “Dead Sun Worship”, puede ser ese espectro malévolo y seductor que no saldrá de tu mente en las próximas semanas.
Todo comenzó por su propio frontman, el señor Sie Carroll inició este proyecto como una sola persona, su fe ciega de creer una supernova doom que arrasará toda la galaxia que rodea el sector, fue el norte y la ambición que le marcó desde un principio para que hoy en día disfrutemos de este pedazo de álbum con una banda al completo. Él solito se ha echado a la espalda un batallón de 4 corsarios sedientos a la distorsión, al lóbrego mundo que ofrece su nuevo “Dead Sun Worship”, el culto al señor riff, actúa mágicamente como si de un hechizo se tratará. El propio Sie Carroll paso por una transición de lo más natural cuando grabó aquella primera demo en 2012. Ni el mismo era consciente de la visión que perseguía Venus Sleeps. Ahora 3 años después, ha reclutado y dirigido un cuarteto con un credo fiel a la libertad de expresión y la exploración que a ellos mismos excita a la hora de tocar.
Venus Sleeps es una banda de DOOM, así con mayúsculas, su forma de jugar con la psicodelia catapulta el arte de estos músicos. Evidentemente como toda banda al género, los pilares son los pilares, nombrar a Sabbath O Wizard, no es más que dar relleno a esta reseña, aún así, los irlandeses van más allá. Su fonética por su obsesión al ocultismo, bañan de negro “Dead Sun Worship”. El dúo de canciones que abre esta sesión funesta está comprendido por “Ether Sleep” y “Dawn Of Nova”, muy similares entre sí y que seguramente caerán en muchas comparaciones, pero qué coño importa si verdaderamente el material es bueno. La pesadez del vil doom estrecha sus lazos con la sensibilidad del sonido arenoso. El martillo de Thor cae desde el cielo y abre ese volcán terráqueo que te absorbe de manera fulminante cayendo por un agujero negro cubierto de nebulosas y enjambres musicales dónde te sentirás como en casa.
Como tantas bandas de la actualidad, la influencia lo es todo, y la primera sorpresa no se hace esperar mucho. “Golden Hair” nos trae el recuerdo del gran Syd Barret este es el gran cover que el cuarteto de Dublín lo clava en honor al demente más glorioso del rock. Quizás con “I Am The Night”, cuarta pieza de este ritual sombrío, es dónde la banda plasme su mejor versión. La sección rítmica es aplastante, todo se hace denso y fangoso, puedes ver cómo te restriegas por la mierda hasta que te sepa a fresas. Pedaleos continuos y algún que otro solo pasan de una primera parte repetitiva a un final de canción de quitarse el sombrero. El claustro llega en su interpretación más extensa, “Age Of Nothing” termina de volatilizarte de tal manera que el sudor corra por tus venas, tu cabeza actuará como un péndulo y las paredes de tu casa se estrecharán debido a la compresión que descarga este relato de más de 10 minutos.
“Dead Sun Worship” suena como si se tratará de un proyecto que lleva 20 años en carretera, como unos veteranos de la especie que vienen presentando su décimo disco, pero no es así. Este álbum debut tiene muchísimo mérito, no sólo por el gran trabajo que ha llevado a su frontman para crear esta nueva mala bestia del páramo, sino por la carnicería que manifiestan sus componentes y que dejan plasmado lo que presumiblemente se presenta como una de las fuerzas más sobrecogedoras de este 2015.