“Horizon”, una escalada setentera con Monolith
En uno de mis tantos domingos de investigación y exploración, de descubrir nuevos proyectos que directamente van a esa lista a las “mejores sorpresas” del curso, me ciño a uno de esos principios de esta web a la hora de llevar al oyente a descubrir su nueva banda favorita.
Esto me llevo a conocer un proyecto como es Monolith. Con su título podemos pensar que estamos ante otra de estaciones gravitacionales proyectando la fuerza bruta del stoner/doom. No es así, y es más bien en el hard rock y las inclinaciones setenteras, las que hacen de su nuevo “Horizon” un disco de escucha y profundización en el mismo.
Se trata del tercer larga duración de este power trío en formación clásica, directo desde los cielos de Bremen. “Horizon” también es el primer álbum de la banda en 8 años de vacío y cuenta con una historia real del aventurero y explorador John Franklin en la que fue su última expedición al Ártico.
Con esta historia, Monolith se recrea de las grandes armonías y recuerdos más clásicos del rock setentero en su amplia gama, ciertos añadidos de distorsión y el éxtasis perfecto entre un buen equilibrio entre sus momentos más vertiginosos, contrarrestados por la dulzura de sus partes más reflexivas y psicodélicas.
“Horizon” tiene sus muchas valías pero ante todo una de las cosas que más me gustan son crecimientos como los de “Be Slow Or Be Dead” o la predecesora “Disease”, finalizados por explosivos y largos solos. Las motitas psicodélicas son otro apartado para el disfrute de la banda, caminando por segmentos más introspectivos como “Stuck In The Ice”. Aquí estamos ante otro denominado in crescendo, viendo a los alemanes jugar y alargarse en sus partes instrumentales, llevando en esa naturaleza a las jam sessions como otro de los vehículos conductores dentro de su estética musical.
Rítmica más característica y notoria para el buen galope de “Midnight Sun”, un tema caracterizado por sus cambios de ritmo y el buen hard rock de Monolith. El riff inicial de “Neptune’s Daughter” se repite dentro de ese hipnotismo al que asistimos en los muchos trances del registro. Sonidos más familiarizados en “Long Way Back”, dónde se congelan en ese blues y acaban cerrando con esa canción principal como uno de los temas más determinantes del disco, si nos citamos a la historia que cuenta.
La verdad que para ser mi primera toma de contacto, la sensación que me deja este nuevo “Horizon” es bastante gratificante. Siempre es una gozada volver al reinado de los 70 y su gran amplitud de sonidos, pero Monolith sabe encajar todas estas piezas para hacer de esta nueva expedición que nos cuentan, toda una escalada a los años dorados del rock.