Wall rinde culto a sus muchas leyendas en el nuevo “Brick By Brick”
Como un proyecto creado en medio del foco pandémico y dando ese amor fraternal un largo salto a las más estrictas influencias de estos hermanos británicos, el proyecto Wall, después de haber fabricado un buen puñado de canciones vistas en entregas como su homónima entrega (reseña aquí) o el posterior “Vol. 2” (reseña aquí), retornan con el nuevo “Brick By Brick” que ellos mismos han bautizado como su debut larga duración.
Sin duda de los 3 registros este es el más largo y también el más dinámico, lo cuál, me da entender sobre todo viendo la diferencia de lanzamiento entre el citado “Vol. 2” y el nuevo “Brick By Brick”, que su empeño y largo alcance de sus muchos detalles, está más que justificado para la ocasión.
Parece que el universo instrumental de los músicos de Oxford se abre en multitud de matices. No hay una sola parte del nuevo “Brick By Brick” que no recuerde a cualquiera de tus discos favoritos. El puente cruza estilismos en sus muchas cordilleras; Black Sabbath, Mastodon, High On Fire, The Sword, Karma To Burn… Wall sabe cómo hacer de ejercicios instrumentales, un buen foco incendiario dónde todo parezca tener un vínculo entre las muchas bandas antes mencionadas y por supuesto las acciones de los hermanos Cole en su destreza por definir los trece actos que custodian “Brick By Brick”.
Un culto a las muchas leyendas que ellos claman en su favoritismo, sin duda. La expresión de estas canciones hablan por sí solas, y en esa academia del riff incisivo, Wall conforma un trabajo que no hace prisioneros, que puede viajar al thrash mediático de los 80, pasando por el heavy metal primitivo de “Paranoid”, la vuelta de tuerca al metal impuesta en los primeros años de este nuevo milenio por bandas como Mastodon o The Sword, y por supuesto esa tendencia desértica que de vez en cuando asoma por cada una de las canciones de “Brick By Brick”.
La contundencia es su respuesta más inmediata. A todo esto hay que añadir esa dosis melódica que acompaña muchas veces, véase el caso de “Legion”, aplicando esa fórmula pegadiza y potente. “Wraith Of The Serpent” parece un tema concebido por el mismísimo Matt Pike.
Pero no solo hablamos de la contribución al riff y la buena labor de Ryan, con Elliot Cole también tenemos tiempo para la diversión tirando de cencerros en la mencionada “Legion” o de congas en un encuentro más tribal como es “Falling From The Edge Of Nowhere”. Eso sin mencionar que esas tantos exponentes desplegados en este álbum, tienen su punto más cercano en los homenajes de “Electric Funeral” de Black Sabbath o “Nineteen” de Karma To Burn.
En mi opinión, la máquina del riff de Wall está más engrasada que nunca en este nuevo encuentro. Razón demás para que ellos mismos lo consideren su estreno, en este fango que impone un groove de lo más ejemplar y excelentes versiones con las que deleitarnos a un trabajo, ampliamente abierto a la mente de los grandes dioses de este género.