Astral Cult – «The Sacred Flame» (2016)
Psychedelic / Heavy Rock / Occult
Posiblemente muchos no conozcan esta banda, yo tuve la suerte de descubrirlos en su homónimo debut en el año 2014, sintiendo esa satisfacción que recorres por dentro cuando encuentras algo soberanamente bueno.
Si vuestro primer inciso con estos Astral Cult se va a convertir en la primera escucha de este “The Sacred Flame” están de enhorabuena, será una buena piedra de toque para conocer un poco más estos músicos de Folsom (California), el mismo lugar dónde reside el famoso centro penitenciario y aquí, con este segundo álbum, los norteamericanos te introducen en su propia prisión plagada de celdas que se mueven entre lo experimental y psicodélico, con las buenas inducciones al rock más pesado y oculto, bajo una buena capa rellena del mejor fuzz.
“The Sacred Flame” es la fuerte apuesta de Astral Cult para este 2016, muy atentos porque puede convertirse en una de las revelaciones del año y para la ocasión, la banda ha tenido que pasar por un baile de movimientos entre sus filas ya que solo los hombres portadores de los mástiles, Stefan Henskens (bajo) y Ryan Musser (guitarra), son los únicos imprescindibles para este proyecto. Las nuevas aportaciones de Alexandre Lapuh como vocalista en sustitución de Samantha Arrasmith y el nuevo batería Brazdon Goodwin, traen un nuevo impulso en la labor de Astral Cult y su ascenso hasta la cima del éxito.
Hay muchos momentos que recoge su segundo álbum para enamorarte desde primeras de cambio y la banda muestra ese traqueteo continuo y juguetón haciendo que el factor psicodélico ruede continuamente en bucle, entrando y saliendo, llenándonos de una labor experimental que se hace patente desde las iniciales “Drowning” o “The Mass-ters”. El señor riff es el amo y señor de este primer acto y Astral Cult muestra unos avances bastante notables.
Yendo un poco por partes, la estupenda aportación de Alexandre se gradúa en piezas como “Call Of The Wild” todo un inicio de suspense in crescendo con el solazo definitivo del señor Musser a las cuerdas, suyos son muchos los momentos del álbum dónde nos deja un verdadero recital. “Beacon Of Darkness” sería la otra pieza que rellene este tramo medio de “The Sacred Flame” siguiendo la línea detonante de su predecesora dando paso a un final del álbum dónde se esconde lo mejor del trabajo.
Cierto es que también los temas más largos se reservan para el final pero es aquí dónde Astral Cult tira de sus clásicas influencias y sacando el pincel para dibujar este sombrío lienzo. Desde las pioneras del doom más madrugador hasta las del heavy metal primitivo. “Quetzalcoatl” es una mezcla entre lo mejor de los primeros redondos de Cathedral o Candlemass, mientras que la canción que lleva el nombre del disco y marca el fin de fiesta, eleva aún más la fuerza, tanto de la sección instrumental capitaneada por un más que correcto Brazdon Goodwin a los tambores, como la de su vocalista que muestra las mejores facetas que enseña en el disco.
“The Sacred Flame” es una de las ocultas profecías que aguardan en este 2016. Desde aquel homónimo debut, parece que los cambios de formación le han venido de perlas a los norteamericanos, ya que no solo se muestra esa gran evolución, sino un largo abanico de influencias que se abre extendiéndose por lo mejor que han dado los diferentes géneros que resultan ser el pan de cada día a esta casa. Desde los 70, hasta los días del presente, Astral Cult, a su manera, les rinde homenaje a todos ellos con su nuevo trabajo.