Egypt – «Become The Sun» (2013)

Primer disco y gran debut de estos doomsters de Dakota Del Norte (EE.UU). Egypt debuta a lo grande con “Become The Sun” (Totem Cat Records), en un disco que se remonta a las raíces que fundó la propia banda, me explico…  La banda en un principio (2003-2005) nació bajo la alineación de frontman Aaron Esterby, quién también hacía y hace las labores del bajo. Lo escoltaban Chad Heille a la batería y Ryan Grahn a la guitarra. Sacaron su demo homónima, dicha demo tuvo su edición en vinilo en 2008 y que lo sacaron a la luz bajo el sello Meteorcity Records. En mayo de 2010 la banda vuelve a reunirse, y se les une el guitarrista Neal Heille Stein y preparan este primer pelotazo como gran debut.

“Become The Sun” es un álbum que bebe y mucho, de las influencias de los setenta pero con todo el espesor del stoner moderno y alguna que otra de sus incursiones al jazz. Incluso sus roncas voces guturales nos acercan mucho al estilo de los ya veteranos Alabama Thunderpussy. En resumen 10 canciones que rondan casi la hora pero que no llega a tal punto, 58 minutos de duración para ser exactos, dura este debut de los americanos que ahora mismo nos metemos de lleno en él.

Abrimos fuego con “Matterhorn” que contiene un sonido de lo más tejano, como unos ZZ Top de lo más pesado, pero con toda la chispa que contienen los barbudos. En los últimos segundos de canción, la banda envenena su sonido y agiliza más su rítmica, brindándonos una última parte de canción más movida.

El retorno de la banda no ha estado exento de sorpresas, cuando en sus inicios la banda se inclinaba por un estilo más doom, con la alineación actual y la incorporación de Stein a la guitarra, asistimos a una de las mezclas más perfectas que se pueden hacer hoy en día, que no es otro que emparejar dos estilos más que reconocidos: el doom y el stoner.  En la actualidad la banda lleva ese sonido más duro en su rock llegando a ser sinónimo de bandas como Motörhead, Saint Vitus o Pentagram.

El heavy metal clásico que nos brindó por primera vez Black Sabbath, parece como si se estuviera redescubriendo, son más las bandas que se van alejando del estricto doom, y mezclarlo con el pesado sonido de las guitarras desde un punto de vista más crudo, pero que fusionado, suena mucho mejor .

“The Village Is Silent”, en lo que se refiere a estilo, sigue los pasos de su predecesora. Una buena ración del mejor southern rock que nos traen a la memoria a los mejores Dazed And Confused. Con ese tono más bajo en los acordes como bien sonaban en los ochenta y setenta, y un mayor dinamismo en la batería. “Orb Of The Wizardking” nos trae la parte más lenta y contundente de este “Become The Sun”. Más de 8 minutos nos dan posiblemente uno de los mejores cortes del álbum que se convierte en uno de los más completos, cambios de ritmo, correcto punteo de guitarra y toda la pesadez de sus potentes y densos riffs.

El cuarto corte del disco es “Stalker”. Las cuerdas del bajo nos acompañan al principio de una canción con una vertiente que se acerca más al classic rock. Siendo más rápida y movida, aquí Stein nos proporciona uno de los mejores solos del disco. La parte final de esta pieza nos impulsa a un lado más blues. Con “Hillside”, entramos en un corte más largo y con una voz más maníaca, mientras que en “Greenland” podemos asistir a los sonidos que bien plasmados nos dejó para los restos, el maestro Hendrix. Un corte mucho más lento y que sirve como relajación e interludio para amenizar la segunda parte del disco.

“Worldeater” nos da en sus primeros momentos, el espíritu que traía el primer corte de este trabajo, aunque esta lleva un ritmo más rápido y que, musicalmente hablando, es más completa. Estamos ante un corte de más de 7 minutos, dónde más allá del minuto 4, explota con un riff legendario al más puro stoner. “Snakecharmer” es de verso sencillo, una canción de lo más simple y sin complicaciones. Muy pegadiza que puede sonar un poco a los que los dioses australianos AC/DC nos han brindado en grandes cantidades en toda su enorme carrera.

El siguiente corte, o mejor dicho cover, les sonará familiar ya que no es otro que “Black Night” y la forma de escuchar como las influencias de los americanos se han inspirado en otros históricos como son Deep Purple. La última canción viene con el nombre de “Elk River Fire”. Once minutos exactos del mejor fin de fiesta que nos pueden dejar estos, no tan nuevos Egypt, pero sí que grandes debutantes. Una buena sesión jam instrumental con sus interferencias al jazz, envuelto en la mejor de las psicodelias más pesadas, una delicia de tema no hay duda y dónde verdaderamente se puede ver el talento de estos tíos.

Diferentes estilos y multitud de influencias, simplemente con leer esta reseña se puede hacer uno la idea de cómo profundiza “Become The Sun”. Desde mi punto de vista es el mejor debut que he escuchado en lo que llevamos de año, lo cuál es decir poco, porque no llevamos más que unas pocas semanas. Pero fuera de todo esto, hablamos de un gran disco y el perfecto pago de aquella demo que nos dejaron como préstamo hace ya unos años. Un triunfal regreso que lo deja como uno de los mejores hits de este primer mes, y sobre todo atentos, porque puede dar mucho que hablar con el paso de los meses durante este año, y ser una de las sorpresas en las listas finales. Recomendadísimo!!