Crónica Duel (Fun House Music Bar, Madrid)

20 de noviembre 2017 Roberto Lucas Deja un comentario

En su primera gira por España, los chicos de Texas, de la mano de Red Sun Barcelona y Garage Sound Fest, (a los cual queremos dar las gracias por el trato recibido para esta casa) tras su actuación en Barcelona, descargaron toda su fuerza y energía en la sala Fun House de Madrid, desplegando todo su potencial sonoro, y haciendo suyo el dicho de sus paisanos de Texas, los ZZ Top, que decían: ”Una buena noche de viernes en Texas dura hasta el lunes por la mañana, y eso se nota en nuestra música”. Precisamente ese espíritu es el que DUEL nos transmitió el pasado jueves a los asistentes.

Energía y sudor por doquier. Abrieron el show, dando cuenta de varios de los temas contenidos en su primer disco “Fears Of The Dead” (reseña aquí). “Fell To The Earth” fue la pieza encargada de dar el pistoletazo de salida a la noche, a ritmo de rock clásico, como si de cualquier garito de carretera de Texas se tratara, sus riffs salvajes se apoderaron de la sala, sonando mucho más potentes y fieros que en el disco. A continuación “When The Pigs Are Fed” y “This Old Crow”, nos dejaron bien claro de que iban estos tipos. Subiendo incluso la intensidad sonora, y derrochando energía sobre el escenario. “Witchbanger” el tema que da nombre a su último disco (reseña aquí), fue el inicio de los momentos más duros de la banda, con un batería que aporraba como un poseso su instrumento, dando el perfecto soporte rítmico a la banda en la parte del set más metálica, seguido de “Electricity” y “Devil”, haciendo las delicias de la concurrencia más amantes de los sonidos pesados.

Ritmos frenéticos, a base de buenos riffs, con un sonido atronador que invadía una sala que desgraciadamente no llegaba ni a la mitad de su aforo. Toda una lástima, teniendo en cuenta el derroche que los tejanos estaban haciendo sobre el escenario. Con una interpretación de “The Kraken”, muchísimo más dura que la versión contenida en su primer disco, y coreada por todos los miembros de la banda, abrieron una parte del set en la que las armonías más psicodélicas hacían acto de presencia, pero sin perder ni un ápice de ardor.

Muestra de esa fuerza fue “The Snake Queen”, donde los riffs eran intercambiados por Tom y por un Jeff bien hidratado, que se le veía disfrutando sobre el escenario como un loco. Absolutamente “on fire”, el simpático de Jeff, iba, venía y coreaba los estribillos con una entrega admirable. Fumando sobre el escenario, a su aire, disfrutaba como un enano de lo que estaba haciendo. A continuación “Heart Of The Sun” y especialmente “Astro Gypsy”, daban un pequeño giro al sonido que salía del escenario, acercándonos a sonidos menos metálicos, y mucho más sureños, con ritmos boogie rock, en un momento en el que un personal entregado, botaba y alentaba a los tejanos, dándoles su aprobación a la puesta en escena que estábamos contemplando. Rock de la vieja escuela, sin aditivos. Esa vieja escuela que ha influido claramente en el sonido de la banda. Rock duro en estado puro.

Para la parte final reservaron dos temas de su primer trabajo. “Fears Of The Dead”, coreado por el público y con algún que otro individuo volando sobre las cabezas del público fue uno de los momentos álgidos de la noche. Una fuerza salvaje estaba saliendo desde el escenario, con una banda atronadora, y que sólo se permitió un pequeño respiro para una larga versión de “Locked Outside” que, si bien tuvo pasajes pausados, seguía conteniendo ese aura psicodélica, sin perder la compostura de lo ofrecido hasta el momento. Solos hirientes se nos clavaban en nuestros cuerpos, con el constante martilleo de JD a la batería, quedando su bajista en un segundo plazo, pero ejerciendo su trabajo de base rítmica a la perfección.

En resumen, una satisfacción haber podido disfrutar de estos entrañables, y divertidos tipos, ofreciendo un concierto al estilo de la vieja escuela setentera. Sin contemplaciones, con un sonido fornido, mucho sudor, cerveza a raudales, y buenas vibraciones. La satisfacción de la concurrencia quedó plasmada a la finalización del show, cuando en la zona de merchandising la gente se agolpaba para conseguir una copia de sus vinilos con la correspondiente firma de alguno de los miembros de la banda.

Desde luego, la noche fue grata, tanto para los que hicimos acto de presencia, como para unos músicos que se fueron enormemente agradecidos con la acogida recibida. Tengo la sensación de que ninguno de los asistentes quedó ni defraudado, ni arrepentido de haber hecho acto de presencia. De la misma manera que los chicos de Duel, quedaron encantados y agradecidos con la acogida recibida, tal y como nos manifestaron en la charla que tuvimos con ellos tras su show.