Pastels – «The Snake King» (EP)(2018)
Psychedelic / Blues Rock
Nuevo producto de la incipiente cantera australiana puesto en circulación el pasado 28 de Enero. Estamos ante un cuarteto procedente de la bahía de Port Feeling, en una pequeña localidad a escasos 70 kilómetros de Melbourne. A estas alturas ya no nos sorprende el descubrimiento de una nueva formación procedente de aquellos lares, puesto que en numerosas ocasiones hemos hablado en esta casa de la proliferación de bandas con gran talento que aparecen cada día en la escena musical australiana.
Pastels gusta de los sonidos de finales de los 60 y primeros 70, con una clarísima influencia de The Doors. El propio nombre de su EP, “The Snake King”, parece ser todo un guiño al “Rey Lagarto”, en clara alusión a Jim Morrison. Lo cierto es que después de escuchar unos segundos su primer tema es inevitable que los ecos de la banda de Los Ángeles vengan a nuestras cabezas.
Un trabajo grabado en cinco pistas en distintas habitaciones y salas de su natal Geelong a lo largo del pasado año. En palabras de la propia banda, una combinación de voces blues soul, con órganos muy Manzarek, y riffs de guitarra en la línea de Jimi Hendrix o Cream, aplicados a una hipnótica psicodelia contemporánea de Black Angels y King Gizzard & The Lizard Wizard.
La realidad es que no se aleja de esa definición del contenido del trabajo. Predominancia de guitarra con efectos de wah wah, un órgano omnipresente al estilo más tradicional, y un vocalista con cálidos registros que apaciguan el ambiente en un ejercicio de ardorosa psicodelia.
La frescura es otra de las notas predominantes, bien sea través de las voces, o bien a través de los instrumentos. “King Tide”, el corte que abre el disco, va por ese camino. El calor del sol californiano (a pesar de estar en las Antípodas) preside este “The Snake King”. Brillo que se intensifica con un tema más dinámico como es “Rose Coloured Glasses”. La banda se torna más ácida, con la batería intensificando las vibraciones lisérgicas de la formación. Punteos que se intercalan en un órgano que mama del blues, consiguiendo una intensidad más profunda.
El disco se sumerge en espacios oscuros donde los punteos de guitarra cobran un protagonismo, abriendo un horizonte de sosiego y calma dentro de la penumbra. Sensualidad y placidez que narcotizan al oyente en “Snake King”. El tema más intrigante gracias al cadencioso trabajo del bajo a los efectos de guitarra ácida.
Cuando una formación tiene un estilo, lo normal es que esa condición aparezca en todos sus temas. Pastels indudablemente tienen su propia condición, y la trabajan con versatilidad. Si es necesario introducir coros femeninos para pintar de otro color la composición, no hay ningún problema, lo hacen. Claro ejemplo es “Break The Cycle”. Otra vez la psicodelia oscura se viste con sus mejores galas para sumergirse en la oscuridad. Una inmersión de la que reflotan a la superficie a golpe de batería y guitarra, dejando que el bajo se mantenga en el abismo más sombrío, bien acompañado por el órgano.
Los primeros acordes del inquietante órgano de “Velvet Potion” nos traen a la cabeza recuerdos de los jinetes en la tormenta de los que nos hablaban Jim Morrison y sus huestes. Misterioso y lento, gracias a una tenue batería, la cuál se va tornando desgarradora según las voces van avanzando arropadas por los efectos de una guitarra suave, nos conforta. La tensión y la intriga se trasmutan en siniestras por momentos en un nuevo ejercicio doorsiano. El rey serpiente se mimetiza con el rey lagarto para el goce de los que somos amantes de los míticos The Doors.
Un trabajo que recomiendo escuchar con la calma y sosiego que su ambiente describe. Permitamos que la lisergia contenida en sus surcos recorra nuestras neuronas en una terapia de redención de nuestra mente. Gratificante ejercicio en una experiencia sonora en la que la elegancia y el refinamiento están presentes desde el primero al último de los cinco temas que contienen el EP. Embutidos en el sonido de las olas que arriban en la arena de las exóticas playas australianas harán que el viento meza nuestros cabellos y la arena se incruste en nuestra piel relajando nuestro cuerpo y nuestra mente en una placentera catarsis.
Cuando el cuerpo no requiere sonidos enérgicos y pesados Pastels pueden ser una interesante opción para la relajación y el disfrute de algo realizado con mucho estilo, sutileza y clase. Nueva psicodelia delicada y fina de una formación que ofrece “The Snake King” en su bandcamp, así como en otras plataformas digitales para el gozo de los amantes de los sonidos más relajados y floridos.
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