Ricky Diamond – “Already Dead”; Furia desenfrenada…
Ver a tipos con camisetas de Entombed, Metallica o que algunos de sus componentes sean fervientes seguidores de nuestro medio, tal vez sea lo único que necesites saber para entender de que va nuestra recomendación de hoy.
Después de “Morphine Lips” (reseña aquí) dónde claramente me advirtieron de sus serias intenciones, pronto me di cuenta de que una banda como Ricky Diamond es de pura carretera, propulsada por un asalto de estructuras machaconas, con demoledores riffs afilados como cuchillas. Aquello fue su debut, un pequeño aviso que avistaba el monstruo que en este 2019 empieza a enseñar los dientes, “Already Dead”.
Para una banda con apenas poco más de 2 años de existencia, el impulso que están llevando en dos larga duración es tremendo. Ricky Diamond, si viviéramos en una realidad paralela, debería de estar copando los grandes festivales con su heavy rock más incendiario. ¿Por qué? Es muy sencillo, las canciones que componían “Morphine Lips” eran y son buenas, pero “Already Dead” lo que contiene son auténticos himnos de batalla, que en muchos casos causaría el fervor al público más extasiado.
Dicho esto, creo que el subtítulo para este artículo es el más apropiado, “Already Dead” es un asalto a tus estímulos en toda regla. Su primer single “Sweet & Salty”, lo dejaba bien claro; buenos, realmente tremendos, doctorados en el riff más asesino, influenciado por la vieja escuela de las bandas de metal clásica o el rock sureño creado en el territorio NOLA. Ese primer single mencionado, se puede definir en este párrafo y desde Torrevieja le rinden un homenaje con honores. A partir de aquí, la pareja inicial de “Already Dead”, marcada en los tiempos de “W.T.O.I.L” y “Doglike Devotion”, es patrimonio de la vieja guardia, un batido que mezcla Motörhead, Entombed, Pantera o incluso los Metallica del “Black Album” y dónde Ricky Diamond te devora en los primeros compases del álbum.
Ante todo estamos ante un estilo enérgico, sin paradas de descanso y diversas instigaciones para recrear la euforia contenida, aquí servida como el mejor entrenamiento. Atentos a un temón como “Bullet In Your Soul”. Bien intencionado en el título que lleva, es como sí el tristemente difunto Dimebag Darrell se fuera un día de juerga a un concierto con Down. El groove característico de Ricky Diamond, aquí hace amasijos con cantos de guerra, coros muy pegadizos y cierto ambiente sureño que nos hacen degustar el viento en la cara mientras vamos a fondo por la carretera.
Con todo lo merendado, muchos creerán que la fiesta acaba aquí, de hecho “Morphine Lips” terminaba en su quinta canción, pero aquí hay una segunda parte que nada tiene que envidiar a la primera y Ricky Diamond vienen más hormonados que nunca. El tándem “M.o.M Told Me So” y “Wall Of Stone”, liberan nuevamente esa furia desenfrenada de los alicantinos con composiciones vertiginosas, abrasivos riffs y una sección rítmica que bombea como el mejor V8.
La parte final del redondo la completan pistas como “Ride Your Time” o “Godammit”, algo más lentas y melódicas pero igual de ásperas en sus funciones, con el firme propósito de marcar un antes y un después en sus directos y darle al público lo que merecen. Detallazo ese regalo de la casa con la acústica “Morphine Lips” como cierre del álbum, un tema para el descanso y el disfrute después de la batalla.
Regreso triunfal de Ricky Diamond con su implacable “Already Dead”. Más grande, más fuerte, más largo, más vitaminado y con mucho más rock del que puedas imaginar, más allá de lo alentador que sonaba su debut. Todo un escaparate para una banda que tiene una cola enorme de influencias entre sus componentes, llevados a diferentes estilos. Estos tipos llevan el mejor rock en las venas y “Already Dead” es su mejor testamento, un disco que en muchos aspectos, es otra razón más de peso para impulsar el dinamismo creciente en la escena de Alicante y llevar el rock más directo y pegadizo a la yugular. Firmes como puta roca.