Brimstone Coven – «S/T» (2014)
Doom / Heavy Metal
Todo un mérito para esta nueva banda de Virginia a la hora de debutar dentro del terreno underground con un sello tan reconocido como Metal Blade Records. Habiendo lanzado un primer EP en el año 2011, el cuarteto norteamericano se vuelve a pronunciar esta vez con su primer larga duración en el que se incluyen 10 novedosos temas más esas 7 canciones que traía su EP, un largo repertorio para los seguidores del heavy/doom clásico al que bien nos acostumbraban los eternos Sabbath.
Las raíces históricas de la música vuelve a citarse con Brimstone Coven con una influencia principal y directa que actúa como tallo central de sus deberes en Black Sabbath, las ramificaciones de ellos se extienden aún más hacía los universos de Pink Floyd o Led Zeppelin. Esto por un lado, por el otro extenderse hacia parajes más oscuros y cenagosos prestándose al doom metal más clásico como harían grandes leyendas como Pentagram o Candlemass.
Brimstone Coven combina perfectamente esas nociones del rock más clásico con las tempranas melodías del doom. El cuarteto de la localidad de Wheeling se fundó en los primeros meses del 2011. Las 5 primeras canciones escritas por su guitarrista Corey Roth se convertirían a la postre en ese primer EP de presentación para la formación.. Al guitarrista se le sumarían tres músicos experimentados de la escena local como eran “Big John” Williams a las voces, Andrew D’Cagna al bajo y Justin Wood a la batería, entre los cuatro montarían su propio plan de batalla para alcanzar su sonido preciado y más definido.
“Cosmic Communion” ya empieza desde sus comienzos a dejar esos aires sabbathianos siguiendo un patrón a la batería con un ritmo bastante simple y recayendo todo el peso en las partes de la guitarra y el bajo. La canción nos mima a través de un flujo maravilloso que quedará establecido para el resto del álbum y dejando claro desde un principio los gustos más directos de estos músicos.
Canciones como “Behold, The Annunaki” o “The Seance”, traen ideas esotéricas a la superficie de Brimstone Coven. Impresionante y una de las destacadas del disco es “Lord & Master”, empollando ese silencio antes de cambiar a un segundo acto de canción con fuerte contingencia al doom más corrosivo.
La voz de “Big John” armoniza con maestría en todo el disco, hay queda de prueba “The Black Door” y la pequeña atmosfera Floyd que deja en esas voces que se doblan como si de la entrada a un vórtice tratará. Lo mismo pasa con la citada “Lord & Master” dejando un coro de adulación satánica. Tampoco podemos olvidar el denso blues que despierta en “The Folly Of Faust”, tema que cierra el disco y que despierta el espíritu más pletórico de Witch Mountain.
¿Puntos fuertes del disco? Pues quizás esa producción que destila cada uno de sus componentes creando esa dinámica que funciona especialmente bien en sus funciones. Pero hay otra cara de esa moneda y tal vez sea que esas partes lentas que lleva el disco arrastren a lugares algo más aburrido lastrando un poco el peso del disco.
Algo de monotonía de vez en cuando para un LP que sumado a esas 5 canciones del primer EP puede resultar algo extenso pero no deja de ser un atractivo en contadas partes del álbum sobre todo para esos adeptos del proto rock setentero. Toda una sorpresa aún por descubrir ya que estos músicos norteamericanos están iniciando aquí su camino pero hay que tener claro cuáles son sus intenciones y lo más importante, sus gustos e influencias. Brimstone Coven tiene su encanto en el sonido familiar que trae en su interior y sus temas más ocultos. Ese es su objetivo y esta su primera piedra para un largo camino.