Celebramos los 50 años de «Kingdom Come», obra de culto de los pioneros Sir Lord Baltimore
Proto Metal / Heavy Psych
(Mercury Records)
Con motivo de un 50 aniversario a la vuelta de la esquina de cumplirse, los orígenes de Sir Lord Baltimore, pioneros de lo que tiempo después se consideraría como stoner rock, entra de lleno en nuestros “Clásicos Del Género” celebrando este medio siglo que se ha merendado una imprescindible obra de culto de los 70, “Kingdom Come”.
Lanzada por un servidor aquí presente cuatro años atrás, aprovechamos una ocasión inmejorable para revivir la destreza de Sir Lord Baltimore, reeditando esta entrada y rememorándola en momentos tan señalados.
Fue una de las primeras bandas norteamericanas pioneras a la hora de poner las semillas dentro del género del psych rock con guiños a lo que un futuro llamaríamos stoner rock. Después de un largo recorrido turístico por muchas de las legendarias bandas europeas, volvemos a los Estados Unidos para presentar una de las rarezas infravaloradas más grandes del siglo pasado.
“Kingdom Come” se llamó al primer disco de este power trío de la neoyorquina Brooklyn. En 1968 el batería John Garner, el guitarrista Louis Dambra y el bajista Gary Justin formarían lo que a la postre se convertiría en uno de los máximos exponentes del heavy metal más madrugador o lo que es lo mismo, Sir Lord Baltimore.
Muchos son los que a día de hoy desconocen de la existencia de este gran grupo, y otros tantos los que la consideran como la primera banda en llevar la etiqueta de heavy metal en su estilo. Otra de las anécdotas que tiene Sir Lord Baltimore es que el cantante era el propio batería John Garner.
Vivieron dos etapas. La primera se originó en su momento dorado entre finales de los 60 y principios de los 70. Décadas más adelante, ya entrados en el siglo XXI, Garner y Dambra volvieron a reunirse para sacar el tercer álbum de estudio 35 años después de su segundo disco homónimo. La reunión para esta segunda etapa vino precedida por una gran edición vía Polygram, en la cual re-editaban sus dos primeros trabajos como aperitivo para lo que sería la llegada del inminente “Sir Lord Baltimore III Raw”.
Las raíces de esta formación comienza tras la expulsión del Fillmore East, su promotor Bill Graham los calificó como un verdadero grano de pus. Corría el año 1969 cuando estos tres melenudos del conocido barrio neoyorquino, acabarían formando Sir Lord Baltimore después de esa expulsión del mítico local. Eran anónimos en aquella época, muchos de los críticos de por aquel entonces desconocían a este talentoso trío. Sus influencias al blues rock y a la psicodelia eran de puro júbilo en sus discos. Como una versión más pesada si cabe de Blue Cheer.
El ritmo de Sir Lord Baltimore, si lo comparamos por ejemplo con Black Sabbath, va mucho más rápido. “Kingdom Come” esta relleno de poderosos riffs que retroalimentan el posterior manejo de unos genios como Deep Purple, o los solos del maestro Hendrix. Un cúmulo de excelencias musicales elevadas a la máxima exquisitez. Estos tíos logran crear ese sonido único y original que tan bien los caracterizó. Si bien los solos a la guitarra de Louis Dambra son uno de los puntos culminantes en el estilo de la banda norteamericana, se podría calificar de prominente la sección que lleva el bajista Gary Justin, un músico que tiene sus momentos más estelares en canciones como “Hard Rain Fallin’” y esa introducción de graves que contiene. Por su parte John Garner se mantiene perfecto a la batería si bien dónde se desmarca es en las voces, llevándolo de un modo más excéntrico y en el que tantos cantantes pintorescos fijarían su estilo en un futuro inmediato.
“Kingdom Come” es un trabajo lleno de energía pero también de muchas caras que ofrecer. La única canción donde bajan las marchas es la sensacional “Lake Isle Of Innersfree” y esa genial aportación de Louis Dambra con sus 12 cuerdas. Las letras del disco vienen más bien enfocadas al amor y los temas psicodélicos, algo que en la segunda etapa se invirtió en su totalidad llegando a componer canciones dónde sus letras citaban más al cristianismo. Toda una ironía que duda cabe.
Led Zeppelin, Cream, Jimi Hendrix, Black Sabbath, Iron Butterfly, Deep Purple, The Who, Blue Cheer… todo formaciones ilustres que si no llegan a ser por verdaderos torbellinos de genialidad como estos Sir Lord Baltimore o King Crimson no se podría hablar exactamente de qué puede ser el verdadero inicio de un estilo legendario como el heavy metal. Ejemplos como “Helium Head” lo verifican calificando un estilo traducido a metal pesado en ese final apoteósico de verdadera destreza técnica en las labores de estos 3 pedazos de músicos.
Desde los ritmos más frenéticos hasta las voces más plañideras, algo sabroso y distorsionado, un verdadero manjar de disco con grandes rarezas del rock como “Master Heartache”, una visión futurista de los primeros Aerosmith más arrogantes y que tiempo después, unos sucedáneos como Church Of Misery le rendirían su mejor homenaje. Grandes bonanzas del rock como “Lady Of Fire” o la inicial “Kingdom Come”, tan pesadas como los primeros discos de los eternos Sabbath, pasando por los momentos más progresivos de la mano de la citada “Lake Isle Of Innersfree” o entregar momentos más atmosféricos como “Man From Manhattan”, toda una aventura de canción. El frenetismo alcanza su estado demencial en “Pumped Up” o “Hell Hound”, dos cañonazos memorables de este inolvidable “Kingdom Come”, cortes de riffs aplastantes, ritmos maníacos y la guitarra de Louis Dambra que serpentea por todo el tramo picando con su sonido más venenoso.
La pregunta que siempre me haré es qué hubiera sido de Sir Lord Baltimore después del año 1971, tan sólo dos años después de su formación y comienzo de su letargo de más de 3 décadas y media para llegar a una segunda etapa que nunca sería lo mismo. El éxito supongo que habría estado asegurado, talento no falta en este brillante “Kingdom Come”. Es una pena que la banda fracasará en sus intentos por ese tercer álbum cuando estaba previsto de lanzarse a mediados de una década como la de los 70. Muchos los proclamaron como los padrinos del stoner rock con permiso de Blue Cheer claro. Los críticos fueron los que los calificaron por vez primera con la etiqueta heavy metal. Todo ellas, anécdotas de máxima garantía ya que sus dos primeros discos están considerados como auténticas obras de culto.
Un grupo como Sir Lord Baltimore es para los amantes de los sonidos más clásicos, lástima que sus dos primeras álbumes actuará como tal trituradora que cayera fuera de cualquier radar, empezando por este “Kingdom Come”, un “Clásico Del Género” totalmente imperecedero.
Muchas de ellas son los cimientos del denominado rock pesado, lo que empezó conocido por HEAVY METAL y 20 años después se llevo al sonido del desierto
Yo creo que junto con Blue Cheer, Pentagram, Black Sabbath y Leaf Hound crearon la base de lo que luego seria el llamado Stoner rock