Ecos De Sabbath; Church Of Misery – “Master Of Brutality” (2001)
Stoner / Doom Metal
(Southern Lord)
Como un indispensable para esta sección, su portada se convierte en una evidencia que habla por sí sola, porque al fin y al cabo, no solo los clásicos de los 70 son los que tiran de esos ecos llevados durante décadas atrás por las eternas huestes de Birmingham. La grandeza de los británicos, traspasa milenios para que a principios del presente, desde las tierras del sol naciente, Church Of Misery iniciará una de las carreras más acentuadas del género pesado con su debut “Master Of Brutality”.
Retrocedemos 19 años atrás para recordar uno de los picos culminantes del stoner/doom de nuestro tiempo. Así pues, el patio de recreo de Tatsu Mikami, un tipo que más allá de ser el bajista y líder de estos japoneses, que en su día se les consideraron con banda más pesada del Japón, también ha tenido que lidiar con los diferentes cambios de alineación que siempre han perseguido a una banda como ellos hasta los días del presente.
Es verdad que la entrada y salida de componentes en pocos casos suele favorecer a la carrera de una banda, Church Of Misery es la excepción al caso, será de los pocos ejemplos que pueda tener un baile de componentes certificados en una discografía simplemente brutal y sin precedentes.
“Master Of Brutality” lo inició todo, otros fieles discípulos de la escuela Sabbath con un nivel de distorsión al que pocas veces pueda seducirte de igual manera. A esto hay que añadirle la mala chicha de los japoneses en ese recuento de asesinos en serie perpetrado en su discografía. Es cierto, en este caso “Master Of Brutality” como título idóneo, encaja a la perfección como arranque despiadado para los de Tokyo.
El boogie de los japoneses dista mucho de esos páramos doom metal a los que muchos medios lo etiquetan, pero en su fuerza instrumental se puede ver como la fuerza bruta de Electric Wizard y los exponentes de obras culmen para el género como el propio “Master Of Reality” o “Vol. 4”, adquieren su influencia para fusionarlos en una mezcla imponente hacia el blues más pesado del a vieja escuela. Firma final, que distingue a Church Of Misery por encima del resto.
Aunque desde mi punto de vista, creo que la mejor alineación de la banda llegaría unos años después, pero es verdad que este “Master Of Brutality”, abriría un ciclo dónde “The Second Coming”, la reedición de “Vol. 1”y el posterior “Houses Of The Unholy” (reseña aquí), confirmarían los mejores años de Church Of Misery. De todas formas, para que nos vamos a engañar… “Master Of Brutality” no sería un álbum tan sonado de no tener algunas de las canciones de la banda, dónde la jerarquía por el riff asesino levante las cortinas de este telón de acero con unos primerizos Church Of Misery, siendo una de las revelaciones más sonadas de principios de siglo.
Ese frenetismo diabólico de “Megalomania” rápidamente nos pone en órbita de un soberano patadón en el mentón. Ed Kemper nos da el comité de bienvenida en ese discurso histórico para abrir “Killfornia” rápidamente nos dan a entender el claro ADN de unos tipos delatados por piezas como esa que lleva el nombre del álbum, riffs de la escuela Sabbath inciando la base de lo que tiempo después definiría a los de Shinjuku, como la fuerza tragadora de riffs que son hoy en día.
Hay bandas y bandas, muchas formaciones sostienen sus pilares a base de un buen riff, y luego hay otras bandas que hacen de ese riff, historia para el género. Aquí es dónde entran nuestros amigos de lejanas tierras, en los que con cada lanzamiento nos dan todo un ritual y sobre todo una clase maestra de cómo el momento deseado, se define como el riff más BRUTAL. Aquí comenzaría su legado, en nombre de aquellos que en su día hicieron posible que nuestro estilo musical estándar, siga perpetuando su especie a base de los cimientos que ellos construyeron como grandes pioneros.