Ecos De Sabbath; Kleptomania – “Elephants Lost” (1979)
El sonido de Black Sabbath se puede ver desde muchas perspectivas, no tendrían la influencia estos historiadores de Birmingham de no haber revolucionado el estilo, de seguir siendo inmortales, de ser en muchas bandas su principal inspiración y sí por qué no decirlo, de tener su propia sección en este umbral psicodélico custodiado por nuestras 4 paredes que rechinan una psicodelia expansiva en todos sus aspectos.
Muchos podrían preguntarse porque Kleptomania tiene su protagonismo en esta sección. Evidentemente hay que conocer un poco la historia de estos belgas, que al igual que muchas bandas de aquel entonces, tuvo demasiados infortunios para poder llevar a las masas sus muchas canciones ya compuestas. El caso de estos músicos paso incluso por los diferentes cambios de alineación desde su fundación en 1968, hasta su disolución en 1976.
Con un buen puñado de canciones para lanzar un disco como “Elephans Lost”, de cuya fecha de lanzamiento exacta data de 1979, sería justo en 1971, cuando una discográfica holandesa de por aquel entonces quiebra.
Sin duda fue un duro revés para los Charlie Deraedemaeker, un entusiasta que deja su gran destreza al mástil de 4 cuerdas en “Elephants Lost”, el virtuoso y creativo guitarrista Wim Hombergen y el batería Rogert Wollaert. Ellos fueron la primera alineación original de Kleptomania, unos músicos que llegaron a compartir tablas con nada y nada menos que Humble Pie e incluso, tener su noche soñada en un marco histórico como era el Marquee de Londres.
Durante todo este tiempo sirvió para que la banda coleccionará una buena ristra de canciones que saldrían de forma física hasta 3 años después de su disolución, bajo la distribución de Flame Records.
Hay que recalcar que lo que era un power trío inicial, no tardó mucho en unirse el guitarra Dany Lademarcher a principios de los 70. A partir de aquí empezarían a sentarse las bases de todos esos ingredientes que contiene “Elephants Lost”, como única obra de los belgas y auténtico ejemplar de culto para el rock setentero.
Definido mayormente por sus largos desarrollos, su amplia creatividad y ese impulso que aunque no deja de tener esos vestigios al proto metal de la época, logradas producciones analógicas y largos desarrollos instrumentales dónde Kleptomania muestra su gran potencial, tampoco dejan de lado una inclinación progresiva que en muchos momentos coquetea con el jazz más intimidatorio.
Ejemplos valerosos como ese cierre con “Divertimentos” nos pueden llevar por diferentes hilos conductores en los que rendirse a sus mágicas jam sessions, y sus muchas introducciones de un órgano que tiene su entrada más notable en la segunda parte de “Elephants Lost”. También es verdad que las voces en este álbum no tienen esa participación tan determinante, y son muchos los temas en los que Kleptomania se deja desafiar más por los segmentos instrumentales en pistas como la inicial “Improve” o “Cadens”.
Es verdad que de alguna manera, y sobre todo basándonos en una información tan borrosa, se dice que todas las canciones de “Elephants Lost” fueron grabadas durante 1971, y aunque la magia de estos Kleptomania puede tener una mejor impresión desde la técnica más progresiva, es verdad que cuando se enfundan en ese proto metal, y sus muchos acompañamientos blues, la sombra de Black Sabbath vuelve a hacer acto de presencia ante otro de sus alumnos más aventajados.
Disfruten del fin de semana, o de los próximos 9 días para los que hayan estudiado más. Ah no, vivimos en España.