Grime – «s/t» (2011)
Brutalidad es la única palabra para describir a esta peña de Trieste, que lanzaron a finales del 2011 este homónimo debut que ofrece una apisonadora por sonido, pesado e intenso. Imaginaos una mezcla entre lo mejor de Black Sabbath, Eyehategod y Pentagram, y como resultado sale Grime.
No intento presentarles nada original, muchos de ustedes ya habréis escuchado este tipo de sonido, la duda que me entra a mí, es si alguna vez lo habías escuchado tan grave y tan brutal como suena en este trabajo. Su música surge de Trieste, cuatro chicos obsesionados y adictos al sonido más sucio y pesado se unen para crear algo oscuro y terrible. Físicamente es doloroso escucharlo, no os voy a engañar, la voz de Marco parece como si el propio cantante deslizará sus uñas por una pizarra, dejando a uno con la mayor grima y los pelos como escarpias. Ensordecedoras guitarras alimentan y sacian la mente de un servidor que se le cae la baba con esta joya del mal.
Los italianos se formaron a mediados del 2010, creando un sonido crudo y castigador para el oyente. Como latigazos en la espalda van cayendo los cortes uno tras otro bajo la agonizante voz de su frontman Marco, quién también hace las labores de guitarra junto con el otro guitarrista Lorenzo. El resto del elenco lo forman Paulo al bajo y Chris en la batería.
Con 6 temas a la palestra que rozan los 30 minutos en su totalidad, sale a la luz bajo el sello Mordgrimm Records. El disco es un monstruo destructor implacable, un asalto a la mente en su versión más sucia y cruel, con amplios surcos dolorosos y aplastantes, densos riffs elevados a la enésima potencia, cuan sludge poderoso.
Su arranque “Self-Contempt” comienza de la forma más sádica con el sonido del tramo de la película “El Cabo Del Miedo”, presenciamos la voz original de Robert De Niro, cuando viola y muerde el cachete de su víctima y así, partir este viaje al desolador infierno de tortura que ofrecen los italianos Grime.
Abruman el oído con un brebaje insistente de riffs largos y densos, mientras la batería golpea entrelazadas como sí de un martillo a la cabeza se tratará. La ácida voz de Marco lanza gruñidos de lo más agonizante dibujando una esencia sabbathiana en su versión más contemporánea. “The Journey”, es algo repugnante, una maldita aberración que te lleva a los sonidos de un pozo sin fondo para perderte en él.
Cuando la malevolencia de su sonido ya es insoportable llega el corte “Charon”, descargando toda la rabia de la banda y su versión más pesada. En sus casi 5 minutos de duración la banda hace un guiño perfecto a los americanos Stonehelm con un sonido prácticamente calcado y dar paso a “Chasm”. Es el corte más largo, ocho minutos exactos de una única fuerza con más brutalidad de la que ya de por sí ofrecen en el resto del disco. Su letargo de riffs incansables entran en escena en esta primera parte de la canción, convirtiéndose en la parte más profunda del disco que se difiere entre pequeñas melodías propias del doom más sobrecargado y oscuro, en la vena de Electric Wizard, y así, pasar a la segunda parte de la canción dónde la demencia de la banda alcanza límites insospechados, llegando a la locura. La parte final del disco es un bandazo tras otro, sin posibilidad de respiro. Está claro, “Chasm” es el soberano que manda en este disco.
La parte final del disco la componen “Born Sick” y “Wife-Beater”, la primera es una muestra de rencor desenfrenado en el stoner más enérgico que puede ofrecer Grime y de ritmo algo más rápido que cualquiera de las anteriores y cerrar con “Wife-Beater”, segundo corte más largo del disco de casi 7 minutos que prácticamente lo podían haber sacado del otro discazo debut del mismo año, de los norteamericanos Windhand.
No hay dudas este señor cañonazo es para adictos del doom más profundo y oscuro. Adictos de Electric Wizard, Windhand, Pentagram o Stonehelm, pasad por aquí, y contemplad el horror que muestran los italianos Grime. Escuchar este disco es como meterte en un pozo con semejante espesor de mierda, que te quedarías en el hasta que supiera a fresas. Grime es una pesadilla que a los oyentes del estilo hace que su lanzamiento sea una satisfacción.
Hace unas semanas los italianos sacaron nuevo material. Su disco se llama “Deteriorate” al que sólo le he dado una escucha, y como suele pasar en este tipo de casos, exige insistir en él para profundizar más. Podéis escucharlo a través de su página de bandcamp dónde tenéis el enlace más abajo. De momento yo me quedo con su debut homónimo.
A que si ehhh!! Jeje y nunca mejor dicho… Gracias por pasarte!
Muy interesantes. Atmósferas densas para tardes de verano sofocantes.