Kadavar – «Berlin» (2015)
Psychedelic / Hard Rock
El sonido vintage, proto rock, hard rock setentero o como gustes llamarlo, está de fiesta porque los germanos Kadavar, uno de los consentidos de Nuclear Blast, están de regreso con “Berlin”, disco en donde aprovechan de tributar a la ciudad que les vio nacer y que viene a posicionarlos como una de las mejores bandas que encabezan el sonido retro actual.
Una carrera, no tan extensa como prolífica, que logran consolidar con “Berlin”, con algunos vaivenes discográficos esta nueva gema retoma el rumbo extraviado en “Abra Kadavar” (2013), disco que con el merecido éxito del debut (2012) y la prisa por editar nuevo material, los llevó a caer en una pequeña confusión que se evidencia en lo poco acertado de un trabajo que compusieron en no más de 10 días, dicho esto y saltándonos un gran en vivo como lo fue “Live in Antwerp” (2014) llegamos al 21 de agosto de 2015, fecha oficial del lanzamiento de “Berlin” y junto a esto, la consolidación de una banda que desde que debutaron no dejan de estar en boca de todos, eso ya es un gran logro.
“Lord Of The Sky” abre de una forma notable el disco con unos guitarrazos a todo The Who, a ratos a ese ritmo enloquecedor de Blue Cheer, y algo ya me suena mágico, Lupus está cantando mejor que nunca y demuestra que puede tirarse el grupo al hombro con su liderazgo vocal y sus grandes ejecuciones en las 6 cuerdas. “Last Living Dinosaur”, segundo single, no se si fue escrita con cierta ironía, pero sí, suenan como unos viejos dinosaurios, con toda esa ambientación psicodélica y aire setentero que la hacen completamente placentera.
Este disco, aunque fue grabado de forma analógica, tiene un sonido que se separa de sus 2 discos predecesores, suena menos contundente, más pulido pero igualmente retro y adictivo. “Thousand Miles Away From Home” es una joya, compuesto con mucha sutileza, suave guitarra y luego un erupción cósmica, gran trabajo de Dragon Bouteloup, la nueva incorporación de los alemanes, que debuta sin pesarle la camiseta, la guitarra de Lupus tiene un groove que sacude y marea hipnóticamente, no estamos en la mitad del disco y la duda se disipa, Kadavar supera lo realizado hace 2 años y pareciera estar alcanzando por fin ese lugar que todos asumían que ya debían ocupar.
“Filthy Illusion”, psicodélico, con mucho luminosidad y un riff pesado que explota cada un minuto. “Pale Blue Eyes” y “Stolen Dreams” suenan perfectas una tras otra, con estribillos y coros muy bien posicionados, algo que no pasaba anteriormente y que es digno de destacar, los arreglos vocales denotan un foco y dedicación especial en todo el disco. El primer avance que pudimos escuchar fue “The Old Man” hacia fines del año pasado en algunos en vivos y que cuenta con video promocional lanzado el 25 de junio, sin duda un punto muy alto, la guitarra se te quedará grabada a la primera escucha y la voz de Lupus con ese aire entre Ozzy y Burke Shelley es demasiado adictiva, hasta ahora lo homogéneo de las composiciones y la producción le da un alto perfil al disco, el tiempo que se han tomado fue más que preciso.
“Spanish Wild Rose”, es uno de los temas más suaves pero no por eso débil que le da una flexibilidad y dinamismo mayor a “Berlin”. “See The World With Your Own Eyes” confirma toda esa amplitud sonora de la que quisieron dotar este nuevo engendro, aquí un alto para la producción de Christoph Bartelt, consiguió mezclar melodías y robustez, meter a la banda en una verdadera máquina del tiempo pero sin recargarla excesivamente de arreglos innecesarios y darle un carácter más orgánico sin perder un ápice su naturaleza vintage.
En tierra derecha y aparece “Circles in my Mind” con ese aire soul mezclado con un hard zeppeliano envolvente allana el camino para “Into the Night” que arremete con todo esa onda NWOBHM, ritmo endemoniado y coro obvio, pero demasiado pegajoso, no puedes dejar de levantar el puño y sacudir las greñas con la simpleza y crudeza de este corte, le habría sacado ese eco maldito, pero es un detalle.
Para el final el bonus track “Reich der Träume” versión de un oscuro tema de Nico, musa de Warhol y conocida por sus participación en el debut de la Velvet Underground y, además, por sus grandes trabajos como solista.
Un gran regreso de Kadavar, un disco lleno de intención y convicción, más empoderados que nunca con la posición de privilegio de la que gozan y que los obliga a superarse a si mismos, esto actuó como acicate para lucir en “Berlin” lo mejor que podían dar, aún así tienen todavía mucho espacio para seguir mejorando, sin alcanzar un disco brillante con “Berlin” aprueban y renuevan ese vínculo que tienen con un publico que hoy más que nunca es adicto a las sonoridades que rescatan lo mejor de los 70 y consiguen interpretarlo cabalmente en pleno al siglo XXI.