“Pain Is Forever And This Is The End”, la prominencia de Mantar al descubierto
Celebrando su décimo aniversario y siendo con este álbum en el que se estrenan bajo los dominios de una discográfica potente como es Metal Blade Records, lo nuevo de Mantar, como cuarta entrega del dúo alemán, asoma su cabeza afilada por el páramo de la 235, siendo una de las dos reseñas que trataremos en el día de hoy.
De alguna manera, y recurriendo sobre todo a la explosión vivida con sus dos primeras obras, el sludge poco a poco que han llevado patentando los músicos de Mantar se ha ido comercializando de tal manera que no es una banda que llega a venderse, sino que se acaba influyendo en ese espíritu que se abraza más al rock, para que esa fusión acabe resultando totalmente venenosa, adquiriendo nuevos conceptos en el nuevo “Pain Is Forever And This Is The End”.
Diez años a la espalda y el respaldo de crítica y oyentes para una formación que se ha ganado su propia legión de fans a base de originalidad y constancia. Una marca personal que poco a poco ha ido creciendo en detalles hasta llegar a cristalizarse en su nueva aventura. Con esto quiero decir que la materia candente en el núcleo sonoro de la banda sigue estando intacta pero también abierta a nuevos frentes. Aquí es dónde entramos en el apartado de la innovación de este “Pain Is Forever And This Is The End”.
El decorado sigue llevando ese atractivo crudo y con la actitud macarra que precede al punk, pero siempre con una producción al alza para optimizar aún más en la marca de los propios Mantar, balanceando todo ese dinamismo a través de los muchos impulsos que nos llevan sus composiciones.
Los ganchos del mismo son continuos, teniendo ese acercamiento al metal más extremo de Noruega, siguiendo mucho la órbita de unos sucedáneos suyos como Kvelertak. A partir de aquí, las melodías y los ritmos chocan como planetas dejando una explosión sin precedentes que resulta ser el cáliz de estos Mantar, llenos de ideas y vanguardismo para que ese semblante suyo, dentro de su cruzada de estilos, también puede ser infecciosamente accesible.
Pongamos como ejemplo pistas como “Odysseus” llevando ese malrollismo interior, en la que intensidad hace de este álbum un no parar, con los momentos de “Grim Reaping”, o el punk descontrolado de “Piss Ritual”. Los estribillos dejan momentos que nos llevan a grandes culminaciones del disco como es su propio avance “Hang’Em Low (So The Rats Can’t Get’Em)”.
La prominencia de Mantar como mejor apellido para este nuevo “Pain Is Forever And This Is The End”, conservando todo el envase exterior que les ha llevado a la formación en estos diez años de largo viaje por carretera y algunas fechas a remarcar, hasta seguir haciendo de su sonido una tuerca interminable que no para de girar y aportar nuevos conceptos. Un trabajo que trae de vuelta a una de las bandas más sólidas del sector y que hacen de su música algo irremediablemente atractivo, citándonos a los muchos ejemplos de este expreso desenfrenado como magistral vuelta de los teutones.
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Web Oficial Metal Blade Records
