Frozen Planet 1969 – ”From The Centre Of A Parallel Universe”; … De vuelta al páramo originario
Mucho más revolucionario que cualquiera de sus lanzamientos anteriores, más ambicioso que cualquiera de sus predecesoras composiciones, los creativos músicos de Frozen Planet 1969, vuelven por segunda vez este año, más vitaminados y con un instinto más inspirado para presentarnos la última de sus ofertas, ”From The Centre Of A Parallel Universe”.
Hace semanas que este álbum lleva dando vueltas por mi cabeza, la primera vez que escuche “Celestial Gambler”, pensé que estaba dentro de una bañera cargada de LSD, teniendo una conversación surrealista con Syd Barret, pero luego me di cuenta que los músicos de Sydney, llevan ese inclinación de superación en su interior y creedme cuando les digo que con este nuevo trabajo, hacen grandes mis palabras.
”From The Centre Of A Parallel Universe”, confirma el laborioso trabajo de Frozen Planet 1969 en este 2017, tras la proyección de “Electric Smokehouse” (info aquí) llegado el pasado invierno, como uno de los más madrugadores del presente curso.
El simple hecho de mencionar esa segunda pieza que contiene este nuevo redondo, es zambullirnos en esos eternos pedaleos y una sección rítmica totalmente liberada. Por momentos, los australianos se adentran en un jam session que da pie prácticamente al jazz más natural, rematando la faena con la llegada de esas melodías en su tramo final. ¿El resultado? El despertar de estos Frozen Planet que después de tantos y tantos ensayos, parecen coger el camino correcto que los lleva en este enredado género, lleno de dificultades, y dónde solo alcanzan la meta los más grandes.
Realmente la primera cara de este LP, que por cierto lo puedes encontrar dentro del catálogo de Pepper Shaker Records (ver enlaces), viene gobernada por esa “Celestial Gambler” y una más aguda “Through Hell’s Kaleidoscope”, dividida en dos partes. Ojo con esta pieza porque puede significar el esperado punto de inflexión en la aún prematura carrera de Frozen Planet 1969. Los efectos de guitarra entran en juego, las reverberaciones se alargan entre ecos celestiales y nuevamente, el trote de la sección rítmica sigue marcando fuertemente el norte de la banda, haciéndose notar en todos los instantes, con una distorsión próspera para el género, equilibrado con la demencia que propaga las seis cuerdas, ya sea en sus riffs o en su más libre improvisación.
Algo más corto es el blues de “The Lady And The Archer” que abre la segunda cara del álbum, nuevo giro de tuerca de los australianos que siguen llenando de versatilidad los muchos ingredientes por los que engrandecer este trabajo, su mejor trabajo hasta la fecha, la llamada a un futuro promisorio por parte de los hermanos Attard, Paul y Frank y el bajista Lachlan Paine. Todo esto evidentemente, queda confirmado con “Ancient Wings Taking Flight”, un burbujeo continuo, solo para enajenados en la órbita de los primeros Floyd, auténtica fuente de inspiración para los de Sydney. El final parece volver justo a la ruta de origen, solo que aquí entra todo el armazón de golpe, con odas tribales, destellos que se pierden entre el vasto cosmos alucinógeno y un cierre mucho más centrado en la psicodelia totalmente innovadora para la ocasión, por parte de la banda.
Sorprendente y a su vez explosivo, serían las dos palabras para hacer una breve descripción a lo nuevo de Frozen Planet 1969. El power trío australiano, más allá de las directrices seguidas en su otro proyecto paralelo, Mother Mars, aquí se alejan de los patrones establecidos, cruzan las fronteras que delimitan los páramos del género y se pierden entre la inmensa naturaleza musical que recorren todos y cada uno de los principios de estos 3 componentes. Flotando en el espacio de un universo paralelo, llegaremos a los orígenes por los que realmente nació este género.
Mantener fuera del alcance de los niños.
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