Inter Arma se da un baño de homenajes en “Garber Days Revisited”
Otro de esos lanzamientos disponibles desde el pasado viernes es el homenaje de nuestros venerados Inter Arma en todo un halagado de emociones definidas en un homenaje para muchos con “Garber Days Revisited”.
Lejos de sus composiciones más extremas, de los blast beat de T.J. Childers (aunque no tanto), o de penumbras asfixiantes, Inter Arma se marca un tanto y bien gordo con este sorpresivo lanzamiento para marcar un inciso en su discografía.
Empezando con una portada más popera de las que nos tienen acostumbrado, digna de resultar un indicativo a lo que encontraremos en su interior, el surrealismo de sus composiciones sigue estando vigente en este nuevo lanzamiento, y es que resulta difícil creer como una banda de cargas más extremas, salga victorioso marcándose un cover como ese notable “Southern Man” de Neil Young. 
Las ideas, las ambiciones de la banda, y sus mayores influencias, poco a poco van cobrando vidas en latigazos más vertiginosos como “Hard Times”, “March Of The Pigs” o “The Girl Who Lives On Heaven Hill” y esas respectivas distinciones a Cro-Mags, Nine Inch Nails o los ochenteros Hüsker Dü.
La creatividad más original de la banda, valga la contradicción claro, sigue su curso con otros puntos a destacar como “In League With Satan” uno de los clásicos de Venom en aquel lanzamiento de 1981 del mismo nombre. Como pueden ver, todo un itinerario por el largo periplo de los 80 en los que Inter Arma, a su manera, nos llena de nostalgia sin perder en ningún momento su identidad como banda, y si sorprendiendo con nuevos matices. Ahí queda un icono de aquellos tiempos con la inmortal “Runnin’ Down A Dream”. Aquí los de Richmond se desmarcan rápidamente lejos de cualquiera de los ecosistemas instrumentales que confinan su hábitat, en su haber plasman una muy correcta entrega.
Destaco en este baño de homenajes la inicial “Scarecrow”, original de Ministry, en ese galope de pesados riffs marca Virginia y la definición más aplastante y claustrofóbica como pueden adoptar pocas bandas como estos Inter Arma. De igual manera, “Purple Rain”, en ese cierre a la figura de Prince. El cuarteto norteamericano vuelve a nadar a contracorriente en toda su conocida discografía en esta balada de maravilloso crecimiento instrumental con dos protagonistas estelares; la belleza de sus solos de guitarra y esas explosivas limpias de un excelente Mike Paparo.
Admirable estos Inter Arma sin detenerse ni achantarse ante nada. La sorpresa está servida, pero las prestaciones de estos tipos están para el disfrute del oyente. Asientos de primera fila para disfrutar de la metamorfosis en pequeñas fases que les ha llevado a los pedazos de artistas que son hoy en día.
