Los historiadores de la improvisación, Frozen Planet 1969, regresan con el nuevo “Not From 1969”
Volvemos nuevamente a eclosionar ante el batido improvisado de enérgicas y empíricas jam sessions procreada desde los cielos australianos. Hoy hacemos especial hincapié para fondear lo nuevo de Frozen Planet 1969.
En este caso dejan un mensaje bastante claro con su título, “Not From 1969”, ya que más bien se lanza en el presente 2022, e imagino que fruto de una de sus tantas grabaciones durante el confinamiento para liberar esa bestia creadora de pasajes heavy psych, con ese buque insignia al emblema del rock setentero.
Nuevamente el trabajo de los hermanos Attard, Paul (guitarra) y Frank (batería), vuelve a unirse al mástil de 4 cuerdas de Lachlan Paine, con el condicionante de que suena más potente que nunca. Quizás un factor determinante a tener en cuenta en “Not From 1969”, el protagonismo de ese bajo en todo el repertorio de esos 3 actos.
Desde su anterior “Hydroculture” (reseña aquí), el power trío sigue en su tratamiento atemporal, lejos de diferenciarse entre la época originaria sentando los primeros fundamentos de la psicodelia y el éxtasis de las jam sessions, y que más de 50 años después sigue ejerciendo con autoridad en muchas formaciones.
En este caso, Frozen Planet 1969 usa aquella fecha tan legendaria para convertirse en uno de sus mejores historiadores, llenando aún más todo esos archivos para rellenar las hemerotecas del mismo, servidas en este caso como provechosas influencias. Una especie de guía que les libere en el camino de la creación.
Desde las resonancias orientales y ese suspense transcurrido en la inicial “Diamond Dust”, pasando por los medios tiempos de “Strangelands” como uno de los grandes viajes del álbum mostrando el equilibrio perfecto en las funciones del seno de Frozen Planet 1969. Mención aparte para ese cierre de casi 30 minutos, conjugando toda la materia de los músicos de Sidney y dejando que esa fluidez abra sus brazos y exima su alma para definir lo gratificante de sus composiciones y el bálsamo que produce escucharlas.
Lisergia a raudales en un compendio de largos desarrollos como magnífica factura de los australianos. Marca de la casa para dar vida a una constante discografía que ahora regresa con el nuevo “Not From 1969”, haciendo gala de sus mejores atributos; la improvisación. Una vez más la historia de la instrumentación espontánea regresa para vivir otro notable capítulo a su tradición.
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