Red Mesa amplia fronteras musicales con el nuevo “Partial Distortions”
Parece que la tónica de este miércoles es la celebración de décadas en un proyecto, lo vimos hace un rato con Worshipper y hacemos lo propio ahora con la llegada de sus compatriotas del desierto de Nuevo México, Red Mesa, quiénes los cumplieron el pasado año para esta formación norteamericana que descubrimos durante la pandemia con un notable “The Path To The Deathless” (reseña aquí).
La contribución de Red Mesa es total, no sólo por su música, su compromiso por muchas bandas a través de su propia discográfica Desert Records deja patente otro reducto del vasto underground al sonido pesado norteamericano. Entre unas cosas y otras, la llegada del nuevo “Partial Distortions” y ese título tan sugerente, era una de las fijaciones que tenía para este final de mes de Abril.
Para la ocasión la banda de Albuquerque ha querido ampliar su reconocimiento y editar también este trabajo con la ayuda inestimable del sello escandinavo Majestic Mountain Records. En un claro llamamiento a abrir las puertas del viejo continente, Red Mesa responde a la llamada con el nuevo “Partial Distortions”, como cuarta entrega larga duración para el power trío.
No me cansaré de repetir lo plagiada que esta la escena del stoner/doom planetario. Son muchas bandas las que repiten la fórmula dentro de un campo puramente magnético como este género para muchas masas. El simple hecho de descubrir formaciones que quieran rizar el rizo, que van más allá de sus propios principios musicales, que la experimentación es un hecho en su música, es una puerta abierta hacía otra dimensión, la misma que nos lleva a sumergirnos por los viaductos más aventureros, y eso señoras y señores, ya es un comienzo que invita a una primera escucha y el deber de oír un disco con mayor detenimiento.
De alguna manera, cuando le doy al play con la primera avanzadilla, escucho en “Óðr” un repentino viaje a mi adolescencia. Está claro de dónde proviene la naturaleza musical de estos tipos, y en los días del presente, yo lo siento como material refrescante por muchos años que hayan pasado. Las novedades también enfrentan a esa tripleta de voces de las que esta vez, parezcan unir las labores de Red Mesa en uno solo, incluso podemos ver teñir de negro su proyección desértica en muchos casos. No debemos olvidar de dónde vienen Red Mesa…
La escucha de “Partial Distortions” da a entender que buena parte del mismo, se escribe bajo la tristeza de la pandemia y su profunda oscuridad. Hay mucha melancolía en sus armonías, canciones como “Dying In The Cold Sun”, muestran esas vertientes sombrías. Por el contrario, la segunda “The Assertion” es un canto a la vieja escuela. Los devotos nómadas del desierto, verán esa “Desert March” como una marcha triunfal por la árida estampa amarilla, un acto instrumental en crecimiento, como otra definición más del experimentalismo de Red Mesa. “Witching Hour” fue el single adelantado en su día, y es quizás también la canción más completa de “Partial Distortions”. Los muchos picos en ese tramo que supera la barrera de 8 minutos, coquetea con las cepas del progresivo y muestra ese alejamiento de los patrones desérticos por la innovación de su propia huella sonora. Esta pista resulta tan interesante como “12 Volt Shaman”, la incursión de sus muchas voces, la diversidad en los cambios de tiempo y una notoria sección rítmica, amplia las fronteras musicales de los norteamericanos.
Tal y como esperaba, la nueva obra de Red Mesa es una invitación sumamente atractiva que nos lleva a esa puerta de que el stoner/doom actual puede tener muchas caras que ofrecer, que su comunión con la alianza noventera más alternativa, es una de sus conexiones más gratificantes y que la estructura de sus delirios mentales, acaba proyectándose en un fascinante “Partial Distortions”, listo para abrir esas fronteras musicales de la banda, en otro salto cualitativo a su carrera.
Big Cartel Majestic Mountain Records
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