Bourbon – “S/T” (2024)
Psychedelic / Hard Rock
Se les podría haber perdido la pista pero no a su música, ni la discografía constituida hasta la fecha. Tras una primera trilogía que yo considero esencial para entender las conexiones andaluza y el rock psicodélico en sus líneas más elegantes, la llama de Bourbon vuelve a reaparecer 6 años después con una nueva entrega epónima.
Los músicos de Sanlúcar de Barrameda reaparecen con las altas temperaturas veraniegas como su candente rock celestial, de conceptos visionarios en su despliegue y con una fascinante odisea emocional como mejor torrente sanguíneo que bombea el corazón de este nuevo trabajo.
Actúa por sorpresa y es precisamente cuando me doy cuenta de ello, el bueno Raúl Guerrero, como principal instigador de ideas primarias en las composiciones de Bourbon, es el que me hace saber de la llegada de su nuevo retoño a través del correo.
Con una sonrisa de oreja a oreja, debo decir que la música de Bourbon la disfruto inmensamente, considero este proyecto como un último reducto entre la gloria de los 70 y ese dramatismo implantando en esos reverberantes pasajes psicodélicos endulzados por los escondrijos de cualquiera de sus esquemas.
Una delicia de escuchar, se trata de la primera entrega en formato homónimo para los andaluces, otra razón de más para entender el extenso y largo brazo de poder oculto entre las muchas gemas que se alargan por el sur ibérico.
El caso de Bourbon es llevar el rock a su mejor naturalidad con los elementos que le preceden dentro de lo detallado del género progresivo-psicodélico. La nueva poesía de Bourbon enfatiza con el carisma de sus composiciones, es imposible no regocijarnos ante tal talento compositivo, haciendo que cada canción de su nuevo trabajo, sea una nueva travesía de la que disfrutar.
Claroscuros no dejan de llevar esa lucha incesante por los tantos senderos de exploración. Esto hace particularmente atractivo la música de Bourbon, tejiendo en sus muchos contrastes y diversificando sobre una idea muchas veces escuchadas, pero pocas veces tan escenificada. Es posible que este sea el mayor secreto del power trio, que como el buen brebaje madura con el paso de los años, y es que han pasado más de una década desde un estreno maravilloso como fue “Fango” (reseña aquí).
Un deleite de detalles vuelven para poner a prueba su toque más personal. Sus minutos más mimados se abren a un nuevo concepto que parezca que a través de este nuevo álbum, y viendo el estilo aquí definido, parezca un punto de inflexión en la carrera de los andaluces.
Aunque muchos puedan decir que son los Bourbon más poperizados, no deja de ser su disco más emotivo. La escucha de este álbum me ha hecho poner los pelos de escarpia en todo momento, lo cuál te da a entender que canciones como “Olvidarnos de Ti” o la propia “Aguacero” que vivimos en nuestro último podcast, despierta esa remanso de belleza interior, con un Raúl Guerrero totalmente entregado en sus funciones. Me encanta “La Espiral”, una intro ciertamente ambiental con tintes psicodélicos que pone a prueba nuevamente el estado camaleónico de Bourbon. Más cadente suena “La Mujer Del Pelo Blanco” que nos trae esos recuerdos más ancestrales de los andaluces.
Intrincado en sus tantos pasajes, el derroche de personalidad de Bourbon es el mejor escaparate en su nueva e imprevista obra. Con todo esto, el factor sorpresa puede estar en juego para los desconocedores de este proyecto. Los que llevamos más de una década regocijándonos en la grandeza de su rock abierto a sus muchos magnitudes, es un episodio más para disfrutar de uno de los talentos más infravalorados de este país en la firme senda de convertirse en toda una formación de culto.
