Desert Storm – «Omens» (2020)
Sludge Metal
Ante todo tengo que reconocer que mi contribución con los músicos de Desert Storm no ha sido la más aferrada precisamente. Lejos quedan aquellos apoyos por nuestra parte, profundizando en parte de sus orígenes como aquel “Horizontal Life” (reseña aquí) como mejor batido de vitaminas para unos Desert Storm que tiempo después llegarían con su “Omniscient” (reseña aquí), en uno de esos discos que yo considero como “punto de no retorno” en su discografía. Este disco en cuestión originaría a los músicos que son hoy en día…
No es que reste valor a lo no mencionado de su carrera, pero me encanta ver como el experimentalismo de una banda va siempre acorde con los mayores exponentes de sus integrantes. Aunque no haya sido reseñado su anterior “Sentinels”, no quita que este penúltimo movimiento para el combo de 5 piezas de la universitaria Oxford, se haya ido sumergiendo más y más en ese océano de densidades pantanosas, que muy poco tienen que ver con el título de su proyecto.
Su fichaje por APF Records durante el 2018 ha dado una mayor musculatura en el seno de Desert Storm. Son muchas las formaciones británicas que brillan en el subsuelo del alcantarillado británico y todas ellas, parezcan que lleven la misma devoción por un género como el sludge. Desde este punto de vista y siguiendo los esquemas en la evolución de Desert Storm, su estilo completa todo el ejército de APF Records, y su dinámica de ideas, sigue al alza en su nueva aventura, “Omens”.
Esta es la nueva profecía de los Desert Storm más versátiles hasta la fecha, llevando un dominio de sus funciones más que ejemplar y a veces guiándonos hasta ese oscuro grunge de los primeros Soundgarden en una pista que coquetea con las leyendas de Seattle como es “Vengeful Gods”. Más allá de esa enfática intro, nos espera un desequilibrio mental en el que te zambullirán en su nuevo álbum.
Las influencias lo son todo, hablan por sí sola en muchas ocasiones, y la devoción de los británicos por los titanes de Oakland, quedan reflejados en ejercicios perturbadores como “Pain, Grief And Suffering” o “The Machine”. La oleada de riffs demoledores, estrechan sus brazos con las atmosferas más cálidas, pero todo fluye en un manto de oscuro alquitrán, en los que Desert Storm se mueven como los mejores peces en la mierda.
No sólo a Neurosis se pueden etiquetar a sus influencias, la escuela de Georgia emparentada por ese trinomio entre Mastodon, Baroness y Kylesa, también tiene mucho que ver en las estructuras de Desert Storm. Unos alumnos aventajados que sacan el martillo a pasear ante la fuerza bruta de la implacable “Black Bible”.
A decir verdad y más allá de cualquiera de las salvajadas antes mencionadas, la madurez de la banda se ofrece en una versión más cristalina en el lado B de este “Omens”. De esto se hace perceptible las tonalidades tétricas de “The Path Of Most Resistance” y su conexo de ideas a las cepas psicodélicas. Aquí es dónde la banda empieza ganarse el pan y presentarnos otro nuevo fragmento de esa constante evolución de este quinteto. “Lockjaw” es caldo de cultivo de ese mencionado sludge progresivo y su despedida deja tintes floydianos en las armonías sutiles de “Rebirth” como gran cierre de un álbum que ejecuta de manera inmediata todos los alguarismos de Desert Storm.
“Omens” es un ejercicio dónde reinan su creativa en las composiciones, así como todos los elementos predispuestos en toda su discografía existente, aquí elevada en el trabajo más contrastado. Otro avance más en el progreso atractivo de sus ideas para estos artistas.
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