Firebreather – «S/T» (2017)
Poco más de 30 minutos fueron necesarios para contemplar el arranque de estos prometedores Firebreather con su homónimo debut, del que dimos las primeras pistas en Agosto con un posterior adelanto, y que ahora perpetra en este viernes en nuestro habitación, como si fuera el rugir de sus vikingos más ancestrales, antes de la batalla.
Suicide Records distribuye el primer retoño de este power trío sueco desde el pasado 13 de Octubre. Uno de esos arranques que mira fijamente a los seguidores del doom más despiadado, mortífero y altamente infeccioso. Esto es básicamente lo que nosotros consideramos como los principales pilares en la música de Firebreather, que sin duda captará la atención de los degustadores a los primeros High On Fire, si el lector aquí presente quiere un norte al que seguir antes de darle al play a su redondo.
Evidentemente, el inicio de Firebreather, está cargado de esos crujientes riffs que gruñen entre la distorsionada atmosfera sombría cubierta de cielos de tonalidades oscuras. Una tormenta de rayos y truenos de proporciones épicas nos clama en esta nueva ofensiva. Arrastrando esos medios tiempos con el fuerte empuje venenoso de los riffs más monolíticos, las cargas con “Emerald Eyes” nos hacen respirar ese fuego a través de una inyección emocional que va cogiendo su cuerpo conforme avanza el track, ante la heroica de Mattias Nööjd, uno de esos guitarristas llamados a ser un nuevo martillo para las hordas del sludge/doom actual. El nivel compositivo de Firebreather es otra de las fortalezas de los de Gotemburgo, y esto se ve con aquel single de adelanto llamado “The Ice Lord”. Es innegable ese guiño a Amon Amarth, a su manera claro está, y toda esa raza vikinga que guardan sus antepasados. Con la misma fuerza que clavarían las lanzas de sus ascendencias, Firebreather lleva esa fuerza a un nivel colosal. ¿La confirmación a todo esto? “Release The Lava”, posiblemente uno de los títulos más bestias del 2017. Prácticamente 12 minutos de arrastre tectónico presentado en su batalla final, ante la enorme criatura que presenta el notable artwork de Adam Burke. Son en estos momentos, dónde una luz interior se enciende y nos preguntamos, ¿qué es lo próximo con lo que nos pueden sorprender estos tipos?, que estamos hablando de un puto debut, y más bien parece uno de los sueños más retorcidos de Matt Pike. Con este cierre tan demoledor, supongo que a estas alturas se habrán olvidado de los compases iniciales arrojados en “Fire Foretold” con esa capa de solidez en sus riffs que significan el punto de partida para asistir a la posterior metamorfosis que se va llevando a cabo en el resto del álbum.
Prometedor debut como otro de los ejercicios exterminadores de este 2017, y los que aún quedan por llegar. Firebreather parezca haber facturado un debut en honor a los combativos tiempos de sus ancestros. Este debut desata su fuerza con la misma crudeza que se liberaban aquellas batallas, cuatro actos de una fuerza descomunal únicamente para la comitiva del sonido pesado. Estamos convencidos de que no quedarán defraudados, tanto como de que estamos ante otro revelador proyecto desde las siempre efectivas garantías escandinavas.