Low Orbit – “Crater Creator” (2021)
Psychedelic / Stoner Rock
Tiempo ahora para hacer temblar este cráter de Toronto, directo desde las entrañas del sello alemán Pink Tank Records y presentando desde el pasado viernes una tormenta de riffs como es su nuevo “Crater Creator”.
Low Orbit nos atentó de sus intenciones más hostiles en pleno verano cuando lanzó el avance de su canción principal y apertura de “Crater Creator” (ver aquí) y conociendo a una banda como son los canadienses, esa cosmología fuzz y las características del espacio abierto y profundo son los condicionantes que alimentan las profundidades de su nuevo ogro.
Los miramientos a las descargas masivas se citan en “Crater Creator” como el segundo registro, sucesor de su álbum debut de 2017, “Spacecake”. Impresiona el sonido que le sacan sus 3 únicos integrantes, basando sus ideas en la clásica alineación de power trío con caras conocidas como es Emilio Mammone, antiguo batería de Sons Of Otis, en otra de esas formaciones que claramente tiene una semejanza con las texturas de Low Orbit.
La misma atmosfera asfixiante que puede dejar la gravedad espacial, puede congelarte al instante con la embestida de Low Orbit en su nuevo trabajo, un disco dónde ante todo se destaca la química de sus 3 componentes, más en forma que nunca, eyectando la propulsión de sus dos mástiles (guitarra y bajo), para los amantes de las toneladas de distorsión.
Un patio de recreo para el amante stoner, que puede palpar perfectamente como tiemblan las paredes de su casa al poco volumen que le demos amplificación con “Crater Creator”, un retumbe de heavy rock de ideología espacial y temática sci fi.
En lo que se refiere a las orientaciones y momentos destacados del álbum, más allá de esa similitud con sus paisanos Sons Of Otis, destacaría una pista como es “Monocle”, toda una culminación en la carrera de Low Orbit que no bajan el pistón en ningún momento y tienen momentos para el recuerdo de este “Crater Creator” con “Timelord”, embistiendo con esa potente sección rítmica y teniendo en muchos momentos su mirada al firmamento de Melvins, para su apartado más aventurero.
Una gran continuación que va más allá de las primeras tendencias mostrada en “Spacecake”. Aquí definitivamente arremete con toda su fuerza, llevándonos en este viaje entre interminables escapatorias llenas de turbulencias, a su travesía más humeante y oscura. Toda una vorágine que imparte cátedra al sonido pesado más reciente desde los cielos de Toronto, con la única intención de hacer temblar los sismómetros del planeta.
