Sonidos Del Ayer; Causa Sui – “Free Ride” (2007)
Psychedelic / Heavy Psych
(Elektrohasch)
Con algunos bailes en la formación, siendo unos músicos que apenas saltan a escena, con conciertos contados con los dedos de la mano y llevando un sello de renombre en la actualidad como es El Paraíso Records, hoy retrocedemos en nuestros “Sonidos Del Ayer” para ofrecerles la versión más directa hasta la fecha de mi álbum favorito de estos tipos, “Free Ride”.
Hasta hace un par de años de su reedición más reciente por parte de El Paraiso Records en 2018, este disco era toda una búsqueda hacerse con él por las redes para su adquisición. Lo mejor de todo, es que en aquel 2007, siendo Elektrohasch quién lo lanzó originalmente, se vendía a precio de chollo en muchos sitios, pero es en la reedición El Paraiso Records, dónde Causa Sui añadió una pista en directo como bonus del LP llamada “El Paraíso”, el resto ya es historia que todos sabemos.
De una manera u otra, “Free Ride” es un disco clave en la historia de Causa Sui, unos tipos que empezaron su carrera musical al frente de bandas hardcore, pero que de alguna manera ese latido por el rock de los 70 y sus muchos exponentes, siempre tenían en mente ese sueño de crear un proyecto donde fundirse en la más profunda de la psicodelia experimental.
Hoy en día, a pesar de que no suelen dar muchos conciertos, la banda ha editado hasta 6 discos de estudio y otros 6 repartidos en las “Summer Sessions” y “Pewt’r Sessions”, con 3 volúmenes para cada uno. Si a esto le sumamos los dos directos en “Freak Valley” (2014) y el directo en su ciudad natal en 2017, entonces haría la suma de hasta 14 entregas en poco más de 15 años de elaboración creativa en los estudios por parte de estos artistas del método. Toda una locura, que duda cabe, pero lo que realmente dignifica que son todos unos currantes y que todo lo engendrado en ese búnker de operaciones de Causa Sui, proveedor de las jam sessions más surrealistas, sale a la luz tan pronto como puedan distribuir los músicos de Causa Sui bajo su sello El Paraiso Records.
Dejando un poco la historia de lado, poco más hay que añadir para calificar el trabajo de los Jonas Munk y Jakob Skott de sobresaliente alto, pero en el caso de “Free Ride” como mencione anteriormente, obtiene esa versión directa de la banda, metida de lleno en unas jam sessions de alucine, inspiradas en la senda de Blue Cheer o Zeppelin, pero también viajando a tiempos posteriores a esos finales de los 60, principios de los 70.
Desde su intro, el disco siempre ofrece una perspectiva paradisiaca, de ahí su título, “Free Ride”. La hipnotización de la banda ante su buena marca se hace omnipresente en todo el hábitat del álbum. Desde su marca de riffs, toda una colección para disfrutar, hasta la rítmica devoradora de Jakob, abrumada por una fuerza natural totalmente apabullante. La voz original de Kasper Markus en esta banda se ofrece como el gran animador de esta fiesta en una pista maravillosa como es “Lotus”, todo un boogie que da el pistoletazo definitivo a la cabalgada que se vive en “Free Ride”.
A partir de aquí, el arco creativo de Causa Sui se abre de una manera magnífica e inolvidable, sino no sería el clásico que es, con ese estridente fuzz que despierta en “Top Of The Hill”. La rítmica de Skott se disfraza prácticamente del mejor Mitch Mitchell en “White Sun” que maravilla de pista, mostrando esa vibración dorada que ellos plasmarían años después como el mejor grito en rebeldía hacía el rock’n’roll.
Un punto culminante del disco está en su cierre con “Newborn Road”, en otra de esas mágicas jam sessions marca de la casa, que hace que Hendrix se encuentre con el desierto y de como resultante, otro de esos viajecitos épicos a la danesa.
Lo dicho, “Free Ride” un disco determinante en la discografía de Causa Sui por motivos más que obvios. No solo es el que dio en aquellos tiempos el nombre posterior para fundar su propia empresa con El Paraiso Records, también es el mismo que define con toda la claridad el gran paso creativo que se acaba definiendo de la mano de los Munk, Rasmussen, Khar, Skott y por supuesto la voz de Markus. Un buen aprecio en las melodías acompañado de un buque de fuzz que pone velocidad de crucero para hacerte navegar por los mejores años del rock más improvisado y la fuerza inventora e improvisada de las jam sessions. Posiblemente aquí se encuentre la base de todo lo que Causa Sui produjo años después, de ahí la importancia en la historia de la banda como para tratarlo como todo un punto de inflexión, pero sobre todo de diversión.