Sonidos Del Ayer; Kanaan – “Windborne” (2018)

Heavy Psych / Progressive / Free Jazz

(El Paraiso Records)

Volvemos al encuentro de un nuevo viernes, el hogar de nuestros recuerdos anteriores, de ese baño de melancolía que en muchos momentos nos lleva a los grandes clásicos musicales de nuestra memoria poblada de súper discos, y en otros caso, a la publicación de un trabajo que para muchos podría estar oculto en el anonimato.

En este caso, “Sonidos Del Ayer” y la sinopsis más propia de la que trata esta sección es la de no alejarse tan atrás en el tiempo y quedarse con las muchas culminaciones registradas dentro del nuevo milenio. Evidentemente, el asombro de muchos despertó en un año bastante señalado para la supervivencia de esta web como fue el 2018.

Con un pie y medio listo para abandonar un proyecto que llegaba a su sexto curso desde su nacimiento en 2012, “La Habitación 235” se tambaleaba en sus cimientos y la lucha por sobrevivir como proyecto. Aun así, un servidor seguía devorando discos entre las muchas dudas de si seguir o no escribiendo. La vida personal así como la laboral, invertía sus funciones, haciéndolo todo más difícil para seguir en esta rutina que me lleva trasladando a esos sueños más reconfortantes dentro la explosión, el júbilo y el descubrimiento de formaciones como Kanaan.

Ellos fueron una de esas tantas razones del 2018 para no olvidarme de lo grande que es “La Habitación 235” y sus muchas distribuciones musicales para hacer soñar a nuestros muchos seguidores, y sobre todo, la importancia que adopta en mi vida. Para la ocasión, una garantía como es el sello El Paraiso Records, presentaba un nuevo recurso a su larga proyección de jóvenes talentos por todo el planeta. Los exploradores daneses Causa Sui, dueños de este sello, lanzaban su caña de pescar en la vecina Noruega, encontrando un prodigio de la técnica y la destreza del heavy psych más progresivo, inducido por unas corrientes al free jazz que verían en la exposición de este power trío un nuevo giro de tuerca dentro del complejo y enriquecedor panorama del viejo continente.

Desde entonces, Kanaan ha llevado una próspera constante con todos esos lanzamientos que hemos seguido en cada capítulo de “La Habitación 235” como fieles eruditos de su estilo. La libre improvisación y la fulminante penetración en jam sessions que muchas veces tocan en los arpegios de la demencia del rock psicodélico más supersónico, son el ADN de una de las grandes revelaciones de la pasada década, y una huella imborrable como es su debut “Windborne”.

Tenía esa espinita clavada desde hace algunos años por echarle el guante a este inmenso estreno de los músicos de Oslo, que mejor que una nueva entrega de “Sonidos Del Ayer”, la cuál cumpliendo dentro de sus funciones, nos lleve a este maravilloso universo sonoro que es Kanaan. Capaces de arrollarnos dentro de un firmamento lleno de nutrientes armoniosos, la entrega número 38 en la vitrinas de El Paraiso Records, presentaría a una banda lejos de cualquier etiqueta sonora, con el aplomo de llevar una sutileza por el rock progresivo, que superaba lo que sonaba dentro de sus mil caras durante muchos años atrás.

Las jam sessions aquí conectaban de una manera diferente pero de lo más significativa. Desde los ritmos motorik de “Harmonia”, los explosivos crecimientos desde esos segmentos que muchas veces miran el amanecer de los primeros Pink Floyd en “Roll Beyond”, la destreza de un batería revelador como es Ingvald André Vassbø y ese experimental viaje que marca los inicios del álbum en “A. Hausenbecken” o el dinamismo fresco en un frenesí como es “Act Upon The Mundane World”.

En un marco abierto a potenciar la marca de Kanaan en su estilo más enrevesado, no había mejor escaparate para mostrar a las masas que El Paraiso Records en nuestro letargo del año 2018. Desde luego uno de los estrenos de aquel año y posiblemente de esa segunda década del siglo XXI, haciendo honor de meter dentro de esa misma coctelera, pináculos fundamentales que van desde los propios Pink Floyd, pasando por los Motorpsycho más dominantes, el libre albedrío de Papir, el delirio de Mahavishnu Orchestra, la definición a la historia del rock revolucionario de Hendrix y por supuesto la eterna oscuridad de Black Sabbath.

Un todo en uno que hace de este “Windborne” un súper disco, dentro de uno de los lanzamientos más bendecidos por el don de la creación de un músico en muchísimo tiempo.