The Devil And The Almighty Blues – «S/T» (2015)
Psychedelic / Blues Rock
(Blues For The Red Sun Records)
¿Que se puede esperar de un sello discográfico llamado Blues For The Red Sun Records? El largo camino por los grandes genios del blues que el tiempo ha traído, tiene su gran recompensa con el gran debut que se marcan los noruegos The Devil And The Almighty Blues, un recorrido por las tierras cosechadas de Canned Heat, Muddy Waters, el recientemente fallecido Johnny Winter o el mismísimo Maestro Hendrix.
El quinteto de Oslo se presenta de esta manera espectacular armado de las Gibson de la época y amplificadores valvulares que harán retorcer las paredes de tu hogar, el sabor puro a roble que trae el bourbon viene desde el otro lado de su producción. Este debut autotitulado ha tenido un lento proceso de fabricación en el estudio y digamos que el resultado es de lo más sobresaliente y desde mi punto de vista personal, la primera gran sorpresa de este 2015.
Se pueden mencionar muchas bandas pero yo diría que muchos de las partes de este LP podrían traer a la memoria de los primeros discos de ZZ Top o Dire Straits, blues rock exquisito hecho con maestría bajo un manto pesado que da como resultado un producto lento, pesado, melódico y muy crudo.
The Devil And The Almighty Blues es la respuesta a esa pregunta de si el blues llega más allá de tierras norteamericanas, ese cruce de caminos que hubo en épocas anteriores cerrado en un cubo como EE.UU, tenía que dar el salto al charco. Muchos como Zeppelin o Rory Gallagher lo hicieron y su legado no conoce límites, dieron de este género de producción casera norteamericana, un giro de tuerca y lo expandieron por el resto del globo terráqueo.
Siguiendo ese tono de cálido blues que siguen en la actualidad formidables formaciones como All Them Witches o Dwellers, y que fuertemente avivan esa escena norteamericana, los nórdicos encienden la mecha con “The Ghost Of Charlie Barracuda” inmejorable comienzo que marca el patrón a seguir durante los próximos 45 minutos llevando ese aire blues con la mezcla del rock más tenaz y pesado. Prosigue con “Distance”, suspense parsimonioso en los primeros instantes, un solo firmado por Billy Gibbons y un final más veloz con las seis cuerdas serpenteando por las dunas de arena.
Cuando un debut se marca su merecido reconocimiento, es porque no está exento de sorpresas, lo que tenemos aquí es una buena sobredosis de impresiones. Una cosa es halagar un disco a la que muchas veces nosotros mismos acostumbramos y otra muy diferente es creer fielmente lo que estas escuchando y tu cuerpo te lo confirme con los espasmos de turno. “Storm Coming Down” tiene un título que lo dice todo. Una tormenta dónde los noruegos se muestran de lo más juguetones basándose en ese play off de más de 10 minutos. Todo un alarde a sus composiciones dónde no importa la extensión de sus pistas, The Devil And The Almighty Blues se muestra cómodo en cualquiera de sus facetas. Llegado el minuto cuatro de canción es dónde estos señores empiezan a escribir el álbum con letras de oro y ese monstruo que llevan dentro comienza a gestar su reproducción. Aquí es dónde empezarás a flotar, dónde la psicodelia entra en escena, dónde no pararás de menear tu cabeza como si te sintieras el Jim Morrison del siglo XXI, es aquí dónde empezamos a sentir las mismas entrañas de este demonio venido del norte.
“Root To Root” prosigue este dúo de canciones largas en la mitad del LP con solos equilibrados y toda la clase dinámica que ellos mismos aportan, digamos que aquí nos regalan lo que puede ser la balada, en su versión, del trabajo. Los cuatro minutos finales ofrecen las mejores florituras a las seis cuerdas y al igual que se predecesora vuelven a poner en juego ese espíritu in crescendo hasta la catarsis final. “Never Darken My Door” levantará las emociones y aplausos de muchos en una de las mejores exhibiciones bluseras del disco recordando mucho al legendario “Rio Grande Mud” de los barbudos de Texas. ¿Y qué decir de ese final? Magnífica pieza que hará salpicar la arena en tu cara como si estuvieras en el salvaje oeste y regalando una vez más, ese mágico fuzz blues que te envuelve en la brillante atmósfera de este colosal debut
Trabajo emocional lleno de un amor profundo por los héroes musicales de estos grandes artesanos del blues rock contemporáneo. No importa que banda ni a que género salgan de esas frías tierras del norte, los noruegos están hechos para todo y este gran inicio que se han marcado es digno de con el tiempo tratarlo como un peso pesado. Sorpresón mayúsculo y sobresaliente. Posiblemente y desde mi punto de vista, el mejor disco en lo que llevamos de este año.